Declaración del Colegio de los Internacionalistas de Venezuela (CODEIV)
Hoy 31 de enero de 2013, día del Internacionalista, el “Colegio de los Internacionalistas de Venezuela” (CODEIV) se une a muchas voces en el territorio nacional e internacional, ante la crítica situación político- legal que está hoy confrontando el país. Alzamos nuestra voz junto con otros gremios ante el deterioro de las instituciones del Estado, el irrespeto a las normas de la democracia venezolana y la violación de la legalidad constitucional. Para algunos, se está perdiendo la República, creada por nuestros Libertadores y proceres civiles en la que se visualizaba el estado de derecho, la separación de los poderes, y el estado democrático.
La historia de nuestra Republica ha sido compleja. El siglo XIX estuvo plagado de sucesivas revoluciones, alzamientos caudillistas y cambios de Constituciones hasta bien entrado el siglo XX cuando por primera vez en 1958, con ciertos antecedentes en los gobiernos de López Contreras, Medina Angarita y el “Trienio Democrático” y tras la caída de la dictadura de Pérez Jiménez, Venezuela se encaminaba hacia la institucionalidad y el estado democrático, hacia el gobierno de civiles. Fueron 40 años de ejercicio de democracia representativa, de fortalecimiento institucional y organización de la sociedad civil comprendido en partidos políticos, el sector empresarial, el sector sindical, el sector gremial, del cual somos fuente al cumplirse hoy el Colegio de Internacionalistas de Venezuela 55 años de su fundación. De igual manera, vimos la institucionalización de nuestras Fuerzas Armadas, sujetas en la Constitución de 1961 en el respeto del ejercicio democrático y en la defensa de nuestra soberanía. Sin embargo en los últimos años hemos visto una gran involución, que nos permite afirmar que entramos tarde al siglo XX e irremediablemente entraremos tarde al siglo XXI.
Con la llegada de Hugo Chávez a la presidencia en 1999 y la instauración paulatina de la denominada Revolución Bolivariana hemos observado a lo largo de éstos 14 años, una involucion en los escenarios internos y externos. Cambios internos nada alentadores, a pesar de aprobarse una nueva Constitución que incorpora la promoción y defensa de la democracia participativa “y protagónica, así como la defensa de los derechos fundamentales del hombre. La alianza cívico-militar que ha consolidado el régimen del Presidente Chávez en lugar de abrir espacios a la participación, hoy intimida, amenaza, irrespeta las minorías, destruye las instituciones, y en lo particular, queremos mencionar el hecho de que se ha destruido la profesionalización del servicio exterior venezolano, al aprobar una Ley Organica, por mayoría simple, aún sin promulgar se aplica de facto, en la cual se somete a la voluntad de una sola persona, la potestad de decidir quienes pueden pertenecer al servicio exterior venezolano. En lugar de ser el servicio diplomático, así como la carrera militar “una Carrera de Estado” ha terminado por ser una Carrera de personas, sin la preparación académica necesaria, que están al servicio de los intereses de la Revolución y no al servicio de los intereses del Estado.
Nuestros principios de política exterior de “Soberanía e Independencia”, “la No intervención en los asuntos internos”, “el respeto de los derechos humanos”, “la defensa de la democracia”, consagrados en la Constitución se han puesto de lado. El gobierno actual se proclama contra el “imperialismo del Norte” mientras paradójicamente ha permitido que “otros imperialismos” provenientes de éste Continente y de otras regiones se inmiscuyan en nuestros asuntos internos. Ademas ha permitido que Presidentes Latinoamericanos y Caribeños afines a su ideología vengan a nuestro suelo e insulte a las voces disidentes internas, las amenace, como sucedió éste 10 de enero de 2013. Ha permitido la pérdida de soberanía marítima al no prestar atención a las negociaciones de nuestras fronteras en el Caribe. Ha permitido las violaciones de los derechos más elementales del hombre como el derecho a la vida y a la seguridad ciudadana, derechos fundamentales políticos como son el respeto a las minorias, la igualdad de oportunidades de participación y la no utilizacion de recursos del Estado para obtener ventajas en los procesos electorales.
Observamos cómo países Latinoamericanos, beneficiarios de la “Revolución Bolivariana” los cuales durante décadas sufrieron cruentas dictaduras militares (tanto de derecha como de izquierda) y Venezuela fuera receptora de sus perseguidos políticos, hoy voltean la cara hacia otro lado, ignorando a nuestros perseguidos por pensar distinto, violando la institución nacida en éste Continente, como lo es el derecho de Asilo por razones de persecución política. La salida de organizaciones internacionales, como son el CIADI y la Corte Interamericana de los Derechos Humanos ensombrece aún más la condición de vida del venezolano en su legítimo derecho de encausar a un gobierno que las viole, en el plano internacional.
Esta crisis institucional que vive la República, en la cual no se juramentó el Presidente electo para el nuevo período 2013 - 2019, debido a la interpretacion dada por la Sala Constitucional del Tribunal de Justicia, nos coloca en una precaria situacion de legitimidad, ya que es el Vicepresidente y el Canciller quienes en nombre de la voluntad popular y nos preguntamos ¿Cuál?, nos representaron ante la reciente Cumbre del CELAC- Union Europea, en la que participaron Jefes de Estado de nuestro continente y de Europa. Esta situacion conspira contra nuestros verdaderos intereses y pone en cuestionamiento las actuaciones de nuestros representantes.
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