GUSTAVO MÉNDEZ| EL UNIVERSAL
viernes 14 de marzo de 2014 12:00 AM
Gas del bueno recibieron los estudiantes el miércoles. Un aproximado de 840 bombas lacrimógenas recolectaron los obreros de la Dirección de Mantenimiento de la Universidad Central de Venezuela (UCV) luego de la arremetida de los efectivos de la Policía y Guardia Nacional Bolivariana para frenar la marcha estudiantil que este miércoles iba a solicitar la renuncia de la Defensora del Pueblo, Gabriela Ramírez.
La brutal ofensiva dejó como un saldo, de acuerdo con los Bomberos Universitarios, 25 personas asfixiadas de las cuales 15 fueron atendidas en el Hospital Clínico de la UCV.
La rectora Cecilia García Arocha, quien marchó y estuvo al frente de la manifestación, repudió el exceso de fuerza que calificó como un "abuso inaceptable e injustificable" por parte de los efectivos de la PNB y GNB contra una marcha pacífica y los daños ocasionados al patrimonio de la Ciudad Universitaria.
Otra consecuencia de la arremetida oficial fue la destitución del director, subdirector y jefe de operaciones de la Dirección de Seguridad de la UCV. Se pudo conocer que la medida se tomó porque funcionarios detuvieron a cuatro personas, dos son estudiantes de la Universidad Santa María, y los directivos los entregaron a los efectivos del Sebin.
Por otro lado, este jueves el presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV, Juan Requesens, reiteró la voluntad del movimiento estudiantil para dialogar, pero aclaró que eso no implica desmovilizar la protesta cívica.
Los diversos voceros estudiantiles han confirmado su interés para dialogar con el Presidente Nicolás Maduro para solucionar el conflicto, pero que pasa por la liberación de los detenidos.
Por su parte, el secretario de reivindicaciones de la FCU, Osberth Gamero, manifestó que no ha acudido a la mesa de la paz porque "las condiciones para el diálogo con el Ejecutivo nacional no están dadas. Nos dicen que quieren paz y nos reprimen, eso son diálogos falsos", acotó.
A última hora se conoció que la dirigencia estudiantil estaba evaluando el llamado que hiciera este jueves el presidente Maduro para sentarse en la mesa de la paz.
La brutal ofensiva dejó como un saldo, de acuerdo con los Bomberos Universitarios, 25 personas asfixiadas de las cuales 15 fueron atendidas en el Hospital Clínico de la UCV.
La rectora Cecilia García Arocha, quien marchó y estuvo al frente de la manifestación, repudió el exceso de fuerza que calificó como un "abuso inaceptable e injustificable" por parte de los efectivos de la PNB y GNB contra una marcha pacífica y los daños ocasionados al patrimonio de la Ciudad Universitaria.
Otra consecuencia de la arremetida oficial fue la destitución del director, subdirector y jefe de operaciones de la Dirección de Seguridad de la UCV. Se pudo conocer que la medida se tomó porque funcionarios detuvieron a cuatro personas, dos son estudiantes de la Universidad Santa María, y los directivos los entregaron a los efectivos del Sebin.
Por otro lado, este jueves el presidente de la Federación de Centros Universitarios de la UCV, Juan Requesens, reiteró la voluntad del movimiento estudiantil para dialogar, pero aclaró que eso no implica desmovilizar la protesta cívica.
Los diversos voceros estudiantiles han confirmado su interés para dialogar con el Presidente Nicolás Maduro para solucionar el conflicto, pero que pasa por la liberación de los detenidos.
Por su parte, el secretario de reivindicaciones de la FCU, Osberth Gamero, manifestó que no ha acudido a la mesa de la paz porque "las condiciones para el diálogo con el Ejecutivo nacional no están dadas. Nos dicen que quieren paz y nos reprimen, eso son diálogos falsos", acotó.
A última hora se conoció que la dirigencia estudiantil estaba evaluando el llamado que hiciera este jueves el presidente Maduro para sentarse en la mesa de la paz.
No comments:
Post a Comment