MAYELA ARMAS H.| EL UNIVERSAL
jueves 29 de mayo de 2014 12:00 AM
En 11 años de control de cambio las distorsiones en el régimen se han agudizado y las importaciones a un tipo de cambio barato han estimulado prácticas como la sobrefacturación.
La semana pasada el presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, Ricardo Sanguino, señaló que la instancia que se encarga de verificar el uso correcto de las divisas detectó que entre 2011 y 2013 hubo diferencias entre las liquidaciones de dólares y los productos que ingresaron al país, y por esa investigación, confirmó que cerca de 20 millardos de dólares se orientaron a las empresas de maletín.
Pero las compras ficticias no solo se registraron en esos tres años mencionados. Desde el inicio del régimen cambiario se han presentado esas prácticas y cálculos de Ecoanalítica revelan que entre 2003 y 2012 la sobrefacturación de importaciones no petroleras alcanzó los 69,5 millardos de dólares.
Los datos no incluyen las cifras de 2013, porque todavía los entes oficiales no han terminado de actualizar la información correspondiente a ese ejercicio.
La firma luego de cotejar las compras externas de 10 años con los niveles de inventarios y las salidas de capitales, determinó que el promedio anual de sobrefacturación estuvo en 6,9 millardos de dólares.
Analistas explican que el control de cambio se asocia con importaciones baratas, por lo tanto, el subsidio cambiario, producto de la brecha entre la paridad oficial y la no oficial, induce a esos procedimientos.
Asdrúbal Oliveros, economista y director de Ecoanalítica, señala que los voceros gubernamentales mencionan que las diferencias entre las liquidaciones de dólares y las importaciones que llegaron al país están desde el 2011, sin embargo, las cifras muestran que esa situación comenzó en 2003 y con los años se ha acentuado.
Las irregularidades con las adquisiciones de bienes en el exterior se observan tanto en el sector público como en el sector privado. La firma calcula que las importaciones públicas ficticias entre 2003 y 2012 fueron 22,7 millardos de dólares. Las compras externas artificiales del sector privado fueron 46,8 millardos de dólares.
Oliveros apunta que la sobrefacturación de las importaciones públicas representa un tercio del total, y esa proporción se debe a que la aceleración en las compras de los entes oficiales se ha estado presentado en los últimos cinco años.
La semana pasada el presidente de la Comisión de Finanzas de la Asamblea Nacional, Ricardo Sanguino, señaló que la instancia que se encarga de verificar el uso correcto de las divisas detectó que entre 2011 y 2013 hubo diferencias entre las liquidaciones de dólares y los productos que ingresaron al país, y por esa investigación, confirmó que cerca de 20 millardos de dólares se orientaron a las empresas de maletín.
Pero las compras ficticias no solo se registraron en esos tres años mencionados. Desde el inicio del régimen cambiario se han presentado esas prácticas y cálculos de Ecoanalítica revelan que entre 2003 y 2012 la sobrefacturación de importaciones no petroleras alcanzó los 69,5 millardos de dólares.
Los datos no incluyen las cifras de 2013, porque todavía los entes oficiales no han terminado de actualizar la información correspondiente a ese ejercicio.
La firma luego de cotejar las compras externas de 10 años con los niveles de inventarios y las salidas de capitales, determinó que el promedio anual de sobrefacturación estuvo en 6,9 millardos de dólares.
Analistas explican que el control de cambio se asocia con importaciones baratas, por lo tanto, el subsidio cambiario, producto de la brecha entre la paridad oficial y la no oficial, induce a esos procedimientos.
Asdrúbal Oliveros, economista y director de Ecoanalítica, señala que los voceros gubernamentales mencionan que las diferencias entre las liquidaciones de dólares y las importaciones que llegaron al país están desde el 2011, sin embargo, las cifras muestran que esa situación comenzó en 2003 y con los años se ha acentuado.
Las irregularidades con las adquisiciones de bienes en el exterior se observan tanto en el sector público como en el sector privado. La firma calcula que las importaciones públicas ficticias entre 2003 y 2012 fueron 22,7 millardos de dólares. Las compras externas artificiales del sector privado fueron 46,8 millardos de dólares.
Oliveros apunta que la sobrefacturación de las importaciones públicas representa un tercio del total, y esa proporción se debe a que la aceleración en las compras de los entes oficiales se ha estado presentado en los últimos cinco años.
No comments:
Post a Comment