ELIDES J. ROJAS L.
| EL UNIVERSAL
miércoles 24 de diciembre de 2014 12:00 AM
Desde hace rato, Venezuela y
los súbditos del proceso vienen sufrieron directamente los efectos de la
vida en socialismo, especialmente de este socialismo cubanoide, más
cercano al comunismo decimonónico que al socialismo tipo francés, por
poner un ejemplo. Las señales están por todas partes y los castigos se
hacen ineludibles. Porque además del socialismo cubanoide hay daños
colaterales que no tiene que ver con lo ideológico sino más bien con la
ineficiencia.
¿Cómo llegan los súbditos del proceso a esta Navidad, a este 24 de diciembre? Jadeando, como perritos atropellados en la autopista Francisco Fajardo, arrastrándose con las patas delanteras, pues a las traseras hace rato que les pasó un camión por encima. Veamos. Desempleo oficial entre 6 y 7%. Muy bien. No es ideal, pero se puede decir que han logrado un buen número tomando en cuenta que la gran industria y la gran empresa están también como el perrito al que el camión le pasó por encima. Pero esa es la verdad de la propaganda oficial. La que saca la prensa todos los meses con titulares más o menos planos: "La tasa de desempleo de noviembre se ubicó en 6,4%" (BCV), por ejemplo. Como decimos, bien. Perfecto. Excelente. Pero la verdad es otra. 45% de la fuerza (BCV) está vendiendo cachivaches en las calles o comida regulada sacada por la vía del bachaqueo y, entre otras modalidades, aprovechando los productos que importa el Gobierno a Bs. 6,30 por dólar para sacar el mejor provecho al súbdito del proceso obligado a buscar el sustento donde sea y como sea. Pero hay más. Leyes y decretos tienen una inamovilidad obligatoria. Las empresas no pueden despedir a nadie ni justificadamente. Ese juicio jamás lo ganará en un tribunal oficialista, salvo que sea un empleado público despedido o se trate de una empresa vinculada al Gobierno. La reducción de personal solo es posible con el apoyo de la revolución. Y, como se podrá suponer, es un ave muy rara por estos tiempos.
De aquí se extrae que, según cálculos de expertos relacionados al sector privado, más o menos un 20% de las nóminas de las empresas simplemente no hacen falta. Son plazas que subsidian al Gobierno. Así que el desempleo anda por encima de 65% fácilmente, si se une todo lo dicho. Pero para eso están las misiones.
Las misiones son el subsidio de vida del proceso y la válvula de escape ante la presión social. Un venezolano resignado a cobrar una miseria y a comer pasta con diablito y mayonesa todos los días, le facilita la estabilidad y los planes al proceso revolucionario. Y eso hace la autoridad. Platica, pastica, diablito y mayonesa. Y van que chuta. Súmele el aguardientico y la tarea está lista. Todo lo demás viene pegado. Inseguridad, crisis de tesorería, crisis de reservas, crisis de divisas, caída de precios petroleros, inflación, falta de oportunidades, jóvenes y profesionales huyen do del país, devaluación, mercado negro de divisas y de todo lo que pueda ser vendido, escasez, fallas en los mercados, colas para todo y a toda hora. Es que ni gasolina hay.
Agobiante la cosa. Pero hoy haga el esfuerzo y, sin que signifique una concesión muy grave para su visión de vida, trate de salir del cajón de la pesadumbre y mire al cielo. Hoy es Navidad. No es de las mejores navidades, pero seguro vendrán mejores.
Feliz Navidad. Hagamos el esfuerzo.
@ejrl
¿Cómo llegan los súbditos del proceso a esta Navidad, a este 24 de diciembre? Jadeando, como perritos atropellados en la autopista Francisco Fajardo, arrastrándose con las patas delanteras, pues a las traseras hace rato que les pasó un camión por encima. Veamos. Desempleo oficial entre 6 y 7%. Muy bien. No es ideal, pero se puede decir que han logrado un buen número tomando en cuenta que la gran industria y la gran empresa están también como el perrito al que el camión le pasó por encima. Pero esa es la verdad de la propaganda oficial. La que saca la prensa todos los meses con titulares más o menos planos: "La tasa de desempleo de noviembre se ubicó en 6,4%" (BCV), por ejemplo. Como decimos, bien. Perfecto. Excelente. Pero la verdad es otra. 45% de la fuerza (BCV) está vendiendo cachivaches en las calles o comida regulada sacada por la vía del bachaqueo y, entre otras modalidades, aprovechando los productos que importa el Gobierno a Bs. 6,30 por dólar para sacar el mejor provecho al súbdito del proceso obligado a buscar el sustento donde sea y como sea. Pero hay más. Leyes y decretos tienen una inamovilidad obligatoria. Las empresas no pueden despedir a nadie ni justificadamente. Ese juicio jamás lo ganará en un tribunal oficialista, salvo que sea un empleado público despedido o se trate de una empresa vinculada al Gobierno. La reducción de personal solo es posible con el apoyo de la revolución. Y, como se podrá suponer, es un ave muy rara por estos tiempos.
De aquí se extrae que, según cálculos de expertos relacionados al sector privado, más o menos un 20% de las nóminas de las empresas simplemente no hacen falta. Son plazas que subsidian al Gobierno. Así que el desempleo anda por encima de 65% fácilmente, si se une todo lo dicho. Pero para eso están las misiones.
Las misiones son el subsidio de vida del proceso y la válvula de escape ante la presión social. Un venezolano resignado a cobrar una miseria y a comer pasta con diablito y mayonesa todos los días, le facilita la estabilidad y los planes al proceso revolucionario. Y eso hace la autoridad. Platica, pastica, diablito y mayonesa. Y van que chuta. Súmele el aguardientico y la tarea está lista. Todo lo demás viene pegado. Inseguridad, crisis de tesorería, crisis de reservas, crisis de divisas, caída de precios petroleros, inflación, falta de oportunidades, jóvenes y profesionales huyen do del país, devaluación, mercado negro de divisas y de todo lo que pueda ser vendido, escasez, fallas en los mercados, colas para todo y a toda hora. Es que ni gasolina hay.
Agobiante la cosa. Pero hoy haga el esfuerzo y, sin que signifique una concesión muy grave para su visión de vida, trate de salir del cajón de la pesadumbre y mire al cielo. Hoy es Navidad. No es de las mejores navidades, pero seguro vendrán mejores.
Feliz Navidad. Hagamos el esfuerzo.
@ejrl
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