Pastor
Heydra. Sin Rodeos
Que el Presidente Maduro ordene detener a Lorenzo Mendoza
acusándolo de traición a la patria (el FMI es parte de los convenios
nacionales), de organización para delinquir (se necesitan tres), y de impulsar
una “guerra económica” que es tan solo una abstracción; contrasta con la
reunión sostenida el sábado por el Vicepresidente Jorge Arreaza en Miraflores,
donde éste le ofreció incentivos millonarios para no tener la producción.
Tiene que ver con la negativa a permitir
que la Comisión.DD.HH de la OEA venga a Venezuela a constatar la situación de
la libertad de prensa; o que se permita una amplia supervisión electoral para
las parlamentarias del 6-D, y sin embargo se proclame que en Venezuela todo
anda sobre rieles.
Es parte del entramado mediante el cual
la economía informal se ha transformado en “bachaqueo” ascendiéndola de rango,
generalizando la corrupción, y desplazando a la formal ya establecida. Tiene
que ver con el fracaso de los MERCAL y PDVAL, y la búsqueda de intermediarios
como MAKRO que venían cumpliendo con esa función.
Es una trama que comienza con los
noticieros de TV de la noche, todos en control del ejecutivo, y las noticias de
la mañana, en las que uno se pregunta cuando está frente a la prensa o el
digital, ¡Qué barbaridad será anunciada hoy!
En Venezuela ya no hay capacidad de
asombro alguna. Nos peleamos con Colombia y cerramos la frontera, sin razones,
hasta enero. O nos metemos en un conflicto con Guyana, en el medio del cual
está metido hasta los tuétanos los intereses petroleros de China.
Mientras Cuba huye por la izquierda y
abre unas compuertas que viene preparando desde hace 20 años con los Estados
Unidos, donde ve un ingreso estable y una inversión prospera en el turismo; el
fiasco de la caída del imperio soviético y los vaivenes del gobierno de Chávez
y Maduro, los pusieron a pensar en ellos. Como siempre ha sido. Venezuela les
da muestras plenas de un amor no correspondido con realidades, ni intercambios
beneficiosos.
Mientras se abre el año escolar, y las
escuelas están en el suelo, no hay pupitres, y en la salud los hospitales están
por los suelos; la reacción del gobierno ante la caída de un avión Sukhoi de
su flota, a lo que lleva es al anunció de más adquisiciones militares, en vez
de ocuparse de problemas más sentidos por una comunidad que vive un poderosos
descontento.
Un gobierno que anuncia un triunfo inminente
en las elecciones del 6-D cuando los parámetros dicen lo contrario, pero,
ciertamente, no lo hace imposible por los errores de conducción política de su
principal polo opositor, la MUD. Es manejado por las Fuerzas Armadas que tienen
en sus principales puestos de mandos civiles a oficiales de alta graduación o
retirados. Y la razón de fondo no es que estos sean o no eficientes, sino que
le son cómodos al Presidente Nicolás Maduro.
Algo
más profundo que un simple problema de modas. Sino por el contrario, constituye
la esencia misma de un régimen que en 16 años no ha podido ser conocido en las
profundidades de sus limitados alcances por una dirigencia partidista
opositora, tan limitada con la del estrecho y lóbrego universo escarlata que
pretende antagonizar.
¿Estamos en presencia de qué?¿Cuál es la razón que se perdió la
capacidad de asombro y de reacción?
Son temas para unos comentarios sobre nuevas consternaciones semanales.
El pan nuestro de cada día.
pastorheydra24680@gmail.com @PastorHeydra
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