EN: http://konzapata.com/2015/06/a-la-exposicion-de-ricardo-menendez-ante-la-onu-solo-le-falto-la-musiquita-de-disneylandia/
Elizabeth Fuentes @fuentesfeliz.
Las monumentales cifras que exhibió ayer el Ministro de Cordiplan en Ginebra, durante su intervención ante el
Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la Organización para las Naciones Unidas (ONU), con el
objetivo de vender lo que ha hecho la revolución en “inversión social”, le habrán funcionado muy bien para
engatusar a los suizos, pero resultó una pésima estrategia al interior de Venezuela.
Porque basta sumar los 732 mil millones de dólares (62% según aseguro Menéndez) que el Gobierno dice que
invirtió en lo social, al 38 % restante – lo que equivale a otros 448 mil millones de dólares , para totalizar nada
menos que 1 billón 180 mil millones de dólares. Miles de millones de dólares. Toneladas de dólares, kilómetros de
dólares. Como se quiera medir, esa cifra multimillonaria ha dado como resultado, un país al borde de la hambruna,
con 50% de la población en pobreza y una deuda impagable.
Asi que la ponencia, que con tanto orgullo despliega AVN, resulta un tiro por la culata. Leamos:
“La exposición de los avances de la revolución estuvo a cargo del vicepresidente de Planificación y Conocimiento,
Ricardo Ménendez, quien destacó que desde 1999 hasta 2014, el Gobierno revolucionario destinó 732 mil millones de
dólares a la inversión social, lo que representa 62% del ingreso nacional. Dicha inversión ha permitido multiplicar los
derechos sociales, así como la democratización en el acceso a los bienes y servicios, negados a la mayoría de la
población en 40 años de los gobiernos de la IV República. El Vicepresidente de Planificación y Conocimiento indicó
que como parte de la inversión social realizada en Revolución, el consumo de los hogares venezolanos se ha
duplicado (no mencionó las colas ni la escasez), mientras que el consumo de hidrocarburos a lo interno pasó de 458
millones de barriles/ día a 703 millones en los últimos 16 años”.
Dijo Menéndez que “entre 1997 y 2013, se reportó un aumento de 177% en el número de suscriptores en telefonía
fija, 2.701% en telefonía móvil, 2.142% en el servicio de Internet y 3.932% en usuarios de Internet. Y que el
consumo de la energía eléctrica pasó de 2.458 kilovatios hora por habitante a 3.313 entre 1989 y 2011, al tiempo que
el porcentaje de hogares venezolanos con neveras aumentó de 74% a 88%, con lavadoras de 43% a 68% y con
cocinas de 90% a 98%”.
A toda esta fantasía expuesta por Menendez, sólo le faltó como música de fondo la melodía de Disneyandia. Porque
el Ministro no solo vendió como una gran cosa el hecho de que en 14 años se haya incrementado el consumo – lo que
debe ser natural por razones demográficas, es decir, la población crece, los jóvenes se casan, se mudan, todo se
multiplica, etc…sino que también aseguró que ” la ocupación formal en la actualidad sobrepasa el 60%”.
“En cualquier circunstancias, incluida guerra económica, guarimba, sabotaje petroleo y golpe de Estado, la Revolución
garantizó plenamente siempre que el ingreso del salario mínimo legal fuese superior al costo de la canasta
alimentaria”, llegó a decir.
Al rosario de exageraciones por no decir mentiras, el ministro agregó que “en Venezuela se han promulgado leyes
habilitantes para, entre otros aspectos, garantizar los derechos de los trabajadores, el acceso a la tierra, la
consolidación de la economía comunal, el incremento del ticket de alimentación, la protección social de los adultos
mayores, mujeres y niños, y la eliminación de la pesca de arrastre”.
Reiteró el carácter feminista de la Revolución Bolivariana, “evidenciado en la promulgación de normativas legales
como la Ley de Protección de la Familia, la Maternidad y la Paternidad y la Ley de la Lactancia Materna, que
contempla la licencia de maternidad, la tercera más larga del mundo para garantizar la lactancia y el cuidado de los
infantes”.
“Pero adicionalmente y de manera inédita, es importante que este comité lo conozca, el ensayo de nuevas y
novedosísimas formas de gobierno, como por ejemplo es la constitución de los consejos presidenciales de gobierno”,
entre ellos, de mujeres campesinos, trabajadores, estudiantes, juventud y Pescadores para diseñar y ejecutar políticas públicas junto al gobierno nacional.
Menéndez también destacó la puesta en marcha de programas sociales como la Misión Madres del Barrio para
impulsar la inclusión económica y el empoderamiento de las mujeres en situación de pobreza, así como la Misión
Hijos de Venezuela, destinada a la protección de las madres solteras en situación de pobreza extrema.
Por supuesto, habló de los ancianos y los niños. De lo protegidos que
están, de la maravilla de pensión que reciben los jubilados
puntualmente. De cómo bajó la inasistencia escolar, de la presunta
alfabetización, que está ya en el 99 por ciento, sin que faltara, como es
obvio, un guiño al porvenir: “la masificación y la democratización de las
tecnologías de la información y la comunicación con iniciativas como el
Proyecto Canaima Educativo, política que desde su creación en el año
2008, ha materializado la entrega gratuita de mini computadoras
portátiles a más de 3.7 millones de estudiantes de educación básica y
media.”
Y, tan tranquilo, leyó lo bien que trataban a los estudiantes
universitarios, sin mencionar los presos por protestar, el cierre de los
comedores de la UCV y la USB, los salarios de hambre de los
profesores, el estado deplorable de las bibliotecas, la fuga de cerebros.
No. Para Ricardo Menéndez, “la población estudiantil universitaria
también ha sido incluida al Proyecto Canaima Educativo, con la entrega
de tabletas.”
¿Como es que reza la cancioncita de Disney? “Duerme ya, duerme bien, y no crezcas jamas, que en la nave azul del
sueño, el más bello sueño, sea un cuento para ti…
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