Daniela Rojas
El 2017 será un año difícil económicamente y con mucha incertidumbre desde el punto de vista político. Durante casi todo el 2016 los dirigentes opositores aseguraban que este sería el año del referendo revocatorio, para lograr salir – por vía pacífica y electoral- del gobierno del presidente de la República Nicolás Maduro. Esto, como bien se conoce, no ocurrió.
Queda menos de un mes para comenzar un nuevo año, que trae consigo más dudas que certezas, con respecto a lo que sucederá políticamente en el país. La mayoría de los venezolanos lamentan que no tienen un camino claro que seguir y quizás afirmen, que se sienten a la deriva. Y es que según datos de la firma Venebarómetro, siete de cada 10 venezolanos, es decir 70,9%, quiere que el presidente Maduro salga del poder.
Para el analista político, Jhon Magdaleno, la oposición solo tiene dos opciones para culminar el mandato de Maduro el año que viene. La primera alternativa que considera más probable es realizar el referendo revocatorio; aunque, de ganar la oposición, el vicepresidente (oficialista) se quede en el puesto hasta finalizar el período en 2019. Mientras que la segunda disyuntiva es que se ejerza una presión tan grande que el Presidente decida renunciar, pero considera menos factible que suceda.
“A mí en lo personal no me parece una mala jugada el referendo 2017 para la oposición, porque podría ser una estrategia para todo el año. El hecho de que se celebre el revocatorio el año que viene va a generar una competencia dentro del seno del chavismo para ver quién será el sucesor del presidente Maduro”, indicó Magdaleno.
Asimismo expresó que la posible victoria de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) estimularía otras elecciones como la de Gobernadores y Alcaldes, lo que generaría psicosocialmente una conducta positiva para los venezolanos, pues liberaría la frustración que se vive ahora.
Magdaleno afirmó que conseguir la renuncia de Nicolás Maduro ya sería una decisión propia y muy poco factible que ocurra. “Para lograr la renuncia del Presidente tiene que ejercerse una presión muy fuerte por parte de la oposición”, resaltó.
De igual manera recordó que para que esto resulte se debe reactivar la presión social en la calle y en todos los organismos internacionales. “Aplicar sanciones por la vía democrática de la OEA, ejercer presión por medio de la opinión pública nacional e internacional, así como de los gobernantes de otros países, y no abandonar las manifestaciones de calle”, enfatizó.
Insistió que el gobierno no va a ceder si la oposición no ejerce presión simultáneamente en todas estas opciones, pues para llegar a las elecciones deben imponerse.
Oposición depende del gobierno
Para el también escritor y analista político, Fausto Masó, la oposición no tiene opciones para escoger el año que viene 2017.
“No es que la oposición escoja, todo depende de lo que haga Maduro”, sentenció.
Masó, quien no ahondó en el tema, indicó que de llegar el gobierno a convocar a elecciones la oposición puede ir, pero si no las realizan deben “buscar otra opción”, expresó únicamente el escritor cubano.
Opinión similar la tuvo John Magdaleno, pues dijo que de no producirse el referendo revocatorio en 2017, “lo único que le queda a la oposición es promover las elecciones de Gobernadores y Alcaldes y procurar lograr un compromiso público del gobierno para que se logren las elecciones presidenciales 2018”, destacó.
Diálogo y transición política
Por su parte el miembro de la Academia Nacional de la Historia y profesor de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), Tomás Straka, expresó para una entrevista para el diario El Impulso, que ya inició la transición en Venezuela.
“Sin duda comenzó un proceso de transición en Venezuela. El sistema político chavista, entendido como un conjunto de relaciones de poder, hoy está descalabrado: le falta la renta petrolera, el líder y el respaldo del pueblo”, aseguró Straka.
Agregó también que aunque el país esté en una transición, hasta el momento no se puede aclarar si para el próximo año habrá una recomposición del sistema o un cambio total del mismo. “Creo que desde ahora hasta abril del próximo año es cuando vamos a saber qué dirección puede tomar este proceso”, anunció.
Mientras que John Magdaleno expresó sobre el tema del diálogo, que está de acuerdo con el mismo, aunque considera que no es el momento. “Creo que se debe elevar la presión por parte de la oposición y luego sentarse con una situación de mayor fortaleza”. Y es que según encuestas de la firma Venebarómetro, el 49,9% de los venezolanos no está de acuerdo con el diálogo y el 48,6 % no cree que de las conversaciones pueda salir un cambio positivo para el país.
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