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Edición elaborada por el Consejo Editorial de Laceiba.
“Efecto Trump”
Marco Rubio enterró las dudas de quienes, hasta ayer, intrigaban con la agenda de prioridades diplomáticas del segundo mandato del presidente Trump.
El nuevo secretario de Estado, en su primer día, conversó con María Corina Machado y Edmundo González, a quienes reiteró el compromiso de Estados Unidos con la restauración de la democracia venezolana.
Rubio pulverizó la campañita de los propagandistas del régimen y normalizadores, quienes afirmaban que la Casa Blanca de Trump no reconocería a González Urrutia como presidente electo y le ignoraría.
Mientras tanto, de nuevo se observan actitudes patéticas en los jerarcas rojos, al salir apresurados a negar, descaradamente, su vinculación con las acciones criminales de sus aliados en el Catatumbo y haciéndose los locos con la paternidad del Tren de Aragua.
A estas alturas, todo está al descubierto. Petro sabe bien que Maduro ejecuta una venganza en su contra, y lo hace con sangre, porque no reconoció su írrita proclamación. Por su parte, en Chile ya están al tanto de lo que pasó con el teniente Ojeda y el Tren de Aragua.
La realidad es que están pasando aceite y no hay parafernalia militar en la frontera que solape la pudrición. Pero ellos lo niegan todo, incluso de pronto se muestran amables con el imperio. Los venezolanos sabemos como se llama eso: para no escribir altisonancias, tan solo diremos que se llama “efecto Trump”.
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