Gustavo Coronel
Ver declaraciones en:
En
la Venezuela al revés del siglo XXI el exguerrillero Fernando Soto
Rojas, quien solo habrá visto una cabria petrolera en alguna tarjeta
postal, es nada menos que presidente de la Comisión de Petróleo del saco
de gatos llamado Asamblea Nacional. En declaraciones que hace hoy
domingo (ayer), reseñadas en ND, Fernando se abre de capa con esta
revolera de rodillas: “Nuestro plan es llegar a 6 millones de barriles
diarios”.
Se
dice fácil, Fernando. Pero sabrás tú cuán difícil es? Te imaginas tú el
esfuerzo logístico, financiero, técnico, político y gerencial
involucrado en más que duplicar nuestra producción actual? No creo que
tengas la menor idea, porque si la tuvieras no habrías dicho tan solemne
estupidez. Con decirte que el régimen ha visto la producción pasar de
3.3 millones de barriles diarios en 1998 a unos 2.6 millones de barriles
diarios hoy en día. Una pérdida de producción de unos 700.000 barriles
diarios, producto de la incompetencia y corrupción de la PDVSA goja,
gojita. Entonces, con que fundillo se sienta la cucaracha, Fernando?
Después
de esa revolera grotesca continúas con una verónica hilarante. Dices
que ese aumento a seis millones de barriles diarios será “para
fortalecer el precio”. Fernando, hasta cuándo metes la pata? Llevar la
producción a seis millones de barriles, si es que ello lo pudieran
hacer, que ya sabemos que no pueden, generaría un desplome de los
precios, no una subida de los precios. Fernando, chico, esto es
elemental. Si en este momento el Largo Ramírez está luchando por obtener
una rebaja de producción de un miserable millón de barriles diarios por
parte de la OPEP, para tratar de moderar la caída de los precios, tu
sales a decir que el incremento de la producción de PDVSA a seis
millones de barriles diarios sería lo ideal para “fortalecer los
precios”. Ese ron que estás tomando es peligroso, Fernando.
Lugo
continuas la faena diciendo que el alza de la producción de PDVSA es
necesaria porque “acaban de aumentar los salarios a los empleados
públicos”. Es decir, tú pareces pensar que ese aumento a seis millones
de barriles diarios podría estar listo dentro de algunos meses. Por
favor, Fernando, si ello fuese posible, se tomaría unos seis o más años,
si es que andan muy rápido. No tienes idea de lo que hay que hacer,
Fernando. Y en seis años ustedes van a estar o tras las rejas o viviendo
en Zimbabue.
Agregas
en tu descacharrante exposición que “aunque los precios del crudo han
descendido, Venezuela tiene una participación muy importante en CELAC y
en UNASUR”. Hubieras podido agregar que son miembros del Consejo de
Seguridad de la ONU, porque ninguno de esos tres organismos tiene algo
que ver con los ingresos de divisas que requiere Venezuela. Al
contrario, todos ellos son centros de costos para el régimen. Le tienen
que pagar a los satélites del ALBA y a ciertos funcionarios de UNASUR
para que se parcialicen a favor de ustedes y tienen que seguir
subsidiando a los Castro a costa de nuestros bolsillos.
Luego
dices algo que me causó dolores de estómago de tantas carcajadas: “el
inconveniente de los precios bajos petroleros es momentáneo porque… el
país no aguantaría tres años así”. En el mundo rojo y absurdo de ustedes
los acontecimientos mundiales deben estar sujetos al acontecer
venezolano. Que molleja! Lo nos perjudica debe terminarse en el planeta,
dices con conmovedora ingenuidad.
Dices
que ustedes tienen excelentes relaciones con todo el mundo como Corea
del Norte, Siria y demás estados forajidos pero no con los Estados
Unidos, país que “es el principal cliente de PDVSA”. Claro, Fernando, a
los buenos clientes hay que hostigarlos, insultarlos, pá que sepan que
Venezuela se respeta, no jile, porque – como decía el comandante eterno -
somos como el espinito
qué en la sabana florea y espino al que me menea… échese otro palo, hermanazo.
Finalmente,
te cambiaste de tema, habiendo agotado el tema petrolero con tu
implacable lógica. Te fuiste hacia el tema militar y nos iluminaste con
la siguiente perla: “las fuerzas armadas de todos los países del mundo
son siempre instrumentos políticos al servicio del gobierno”. Así mismo
lo dijiste, Fernando, sin anestesia. Agregaste: “la milicia debe tener
contenido político”, como diciendo que el lumpen que forman esos
cuadros deben estar adoctrinados ideológicamente para servir al régimen.
Sin saberlo, Fernando, estabas exponiendo la más pura teoría fascista
de gobierno.
Ay
Fernando, como me he reído con tus rebuznos. Me rio porque sé que
Maduro es un hombre inteligente y culto, quien jamás te haría ningún
caso. En sus manos maduras, como dijo Ernesto Samper, la nación está
segura. Y, como también lo aseguró hace algún tiempo Alfredo Toro Hardy,
Nicolás es un político maduro, como negarlo?
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