Tareck El Aissami llegó temprano al Palacio Federal Legislativo para celebrar un acto que notificó con poco tiempo de antelación. Rodeado de militares, los suficientes para que la Guardia Nacional abriera todas las puertas de la sede. En el Salón Elíptico, contrariando las ideas fundamentales del acta de la independencia, alabó la Constituyente impuesta, aupó el amedrentamiento a la oposición, pidiéndole al chavismo que “asistiera” a la sede del Parlamento; habló del congreso anfitriónico (sic) de Panamá, de un tiempo de parto, de la necesidad de forjar una nueva independencia “en la batalla, en la calle" y afirmó que la Asamblea Nacional es "un poder del Estado que ha sido secuestrado por la oligarquía". Este primer asalto fue la negación de la solemnidad que este día entrevera, pero sirvió para desconocer la voluntad popular de nuestros votos, modelar el asalto siguiente, legitimar la agresión de los chavistas y garantizarles impunidad...."
Seguir leyendo,
EN:
No comments:
Post a Comment