Desde horas del mediodía de este martes venezolanos en todo el país comenzaron a obstaculizar las principales calles y avenidas para rechazar de manera contundente la dictadura que protagonizan Nicolás Maduro y sus corifeos.
Durante la actividad, que tiene una duración de al menos seis horas, decenas de calles y avenidas del este y el oeste de la capital venezolana permanecieron desoladas y bloqueadas por manifestantes que portaban banderas, pancartas y consignas en contra de Maduro y la Constituyente cubana.
Sin embargo, la actividad pacífica fue entorpecida una vez más por los cuerpos de represión del Estado, quienes dispararon perdigones y bombas lacrimógenas en varias de las concentraciones que tuvieron lugar en todo el territorio nacional.
Voluntad Popular (VP) informó mediante un comunicado que “durante una emboscada resultó herida” la concejal caraqueña Gladys Castillo, “quien recibió un fuerte golpe en la cabeza cuando cayó al suelo visiblemente afectada por los gases lacrimógenos”.
También reportaron el despliegue de los grupos paramilitares armados del gobierno que dispararon contra el Hospital de Clínicas Caracas en San Bernardino.
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