ASCENSIÓN REYES R.
HERNÁN LUGO-GALICIA
HERNÁN LUGO-GALICIA
30 DE OCTUBRE 2016 - 12:01 AM
A escasas horas de la cita con el mediador del Vaticano, la oposición acordó acudir al encuentro, pero insistirá en que la mesa sea denominada de resolución de conflicto y no de diálogo. En lugar de asistir como partidos enviarán un emisario, en vista de que no desean que el gobierno manipule una virtual foto con el presidente Nicolás Maduro y autoridades partidistas y anuncie la instalación de una mesa de diálogo cuando apenas comenzarían los intercambios. En vista de que hay diferencias entre los partidos sobre la agenda, el secretario ejecutivo de la MUD, Jesús Torrealba, acudirá al sitio que se paute y expondrá las diversas peticiones, de acuerdo con las fuentes, como una forma de evitar que monseñor Emil Paul Tsmecherrig se marche del país. De hecho, el gobernador de Miranda, Henrique Capriles, aseguró el pasado martes: “No embarcaremos al Papa”.
En la MUD existen dos posiciones: Voluntad Popular y AD exigen que haya referéndum revocatorio en 2016, así como liberación de los presos políticos. Un Nuevo Tiempo y Primero Justicia señalan que, si no es posible el revocatorio, hay que lograr el adelanto de las elecciones presidenciales en 2017, acompañadas de otros comicios, como el de la Asamblea Nacional, como planteó el oficialismo. “Existe una posición intermedia de UNT y Torrealba de sentarse a plantear las cosas fundamentales de la oposición e insistir en adelantar las presidenciales. Sería una mesa de conflicto, no de diálogo”, indicaron voceros, ante la suspensión de 20% para activar el revocatorio y la negativa del gobierno en anular las sentencias de los tribunales regionales.
El adelanto de comicios generales sería un acuerdo supraconstitucional, pues no está previsto en la carta magna. Capriles recomendó hacer una enmienda constitucional, de manera que así no sea burlada por el gobierno pues, el martes, expresó: “Son unos bichos y no se les cree nada”. Sin embargo, otras voces avalan un acuerdo: “Una presidencial adelantada incluye la posibilidad de que el chavismo decida su candidato incluyendo a Maduro y que se haga en diciembre de 2016 o el primer semestre de 2017 para que así la MUD escoja su candidato por primarias o consenso. Así mantendríamos la mediación del Vaticano que ha advertido de que si no hay acuerdos se marcha”.
Durante las reuniones exploratorias, la Comisión Presidencial del Diálogo (PSUV) ha rechazado elecciones en 2016, pero que los comicios de gobernadores sean en el primer semestre de 2017, como estableció el CNE; Parlamento a finales de 2017; y presidenciales a principios de 2018. El vicepresidente Aristóbulo Istúriz confirmó ayer esos datos cuando dijo lo que deseaban: “Maduro se mantendrá en el poder pero necesitamos derrotar a la Asamblea y así reconquistar la institucionalidad”.
En predios de la iglesia católica desconocían, en horas de la tarde, si se reunirían el Vaticano, mediadores Unasur, gobierno y MUD. “Eso está oscuro. Desconozco si habrá diálogo, pero considero positivo la disposición de las partes a hablar”, afirmó monseñor Diego Padrón, quien aseguró: “El nuncio sigue aquí”.
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