CARLOS
BLANCO
¿Por qué Antonio Ledezma está
preso? ¿Por qué el régimen se ha ensañado en su contra? Se podría decir que no
hay que escudriñar mucho dada la inmensa cantidad de ciudadanos que han sido
perseguidos, torturados, apresados, enjuiciados, asesinados o exiliados. Sin
embargo, siempre hay una singularidad que hace que sea este y no aquel. En el
caso de Antonio Ledezma pienso que es por lo que llamaría su serena
resistencia. Sí señor: serena resistencia.
Tiene características que lo
ennoblecen. Fue estrecho colaborador de Carlos Andrés Pérez y nunca renegó de
su afecto ni afinidad política. En las peores horas del ex presidente estuvo a
su lado sin importarle la canalla desenfrenada y notable que se le abalanzó y
por décadas hundió al país. No era fácil; sobre todo después de haber visto a
varios de los ex colaboradores de CAP tomar distancia post mórtem del que les
abrió caminos políticos y profesionales.
La lucha por la renovación de AD
condujo a Ledezma, al final, a salirse de sus filas. Siempre ha mantenido
invariable su afecto con la base adeca. Muchos pensaron que podría haber sido
el candidato de esa organización para las primarias de 2012, y él lo buscó,
pero pudieron más los odios “mellizales” de los que hablaba Rómulo Betancourt.
Ha sido campeón de la unidad de
la oposición, pero con posición. No sigue las encuestas para fijar sus puntos
de vista y más bien obliga a las encuestas a reflejar procesos en los que mete
el hombro. Los que pronosticaban su desahucio político hace años no vieron cómo
se proyectaba su candidatura para la alcaldía ni el arrastre popular que tuvo y
conservó para una nueva elección. Desde allí, sin oficina, acosado por el
régimen, y con magros recursos, ha logrado proyectarse como gerente de la
ciudad, pero, sobre todo como figura emblemática de la resistencia y del
cambio.
Llegó al convencimiento de que
había que promover el reemplazo constitucional del régimen, y al lado de María
Corina, Leopoldo López, Gabriel Puerta, la Movida Parlamentaria y dirigentes
juveniles de todos los sectores, planteó “la salida”. Desde entonces recibió
las embestidas del gobierno y de un sector de la oposición, sin que se le
enfriara el guarapo ni dejara de lado su prédica unitaria.
No ha cometido delito alguno. No
hay pruebas de nada. No hay siquiera juicio. Lo único que hay es la decisión de
Nicolás Maduro y su horda de mantenerlo preso porque les da la gana.
Lo que no saben es que Ledezma es
caballo de carreras largas. Primero se cansará Maduro. Y cuando amanezca la
libertad, allí estará Antonio Ledezma, al frente, como siempre.
Vía El Nacional
Que pasa Margarita
No comments:
Post a Comment