ELIDES J. ROJAS L.| EL UNIVERSAL
miércoles 5 de febrero de 2014 12:00 AM
Mientras el gobierno de la doble cara, los castrocomunistas hippies, los revolucionarios comeflor, adelantan todo un programa nacional de amor y paz, en la televisión venezolana se puede encontrar una señal entregada a los militares con una muy buena programación bélica en la que sobran las guerras y el plomo.
Cosas de la revolución. Son así y no tienen remedio. En los últimos días a Diosdado Cabello, cabeza visible del ala militar del clan que gobierna el país desde la muerte del comandante eterno, pero que ya no está; le ha dado por avanzar en su promoción personal y en hacer ver quién es el que de verdad manda (el club de mando son seis y dos son cubanos). En esa tarea se montó en el asunto de la inseguridad, la guerra económica y el contrabando de extracción en la frontera, un área en la que solo el jefe de los militares, como es Cabello, podría actuar sin que le quemaran la bacinilla. Todo el país sabe que desde hace muchísimos años, más que los 15 de esta estafa mentada revolución, los militares que controlan las fronteras son los mismos que controlan y administran el contrabando. Esto lo hacen a la vista de todos desde los tiempos de Pérez Jiménez. Son los amos de ese negocio, ahora más rentable que nunca. Y para poder hacer propaganda con las operaciones de Arreaza y el propio Cabello había que anunciarle al país que la honesta revolución había tenido el atrevimiento de sacar del negocio a un montón de militares que ni juicio tendrán. Irán a otro destino a seguir acumulando barrigas y chapitas. Pura propaganda. Hay demasiada plata y demasiada experticia en esos verdes para abandonar eso así no más. Simplemente entra otra gerencia a trabajar con el otro lado para seguir pasando la carne, la harina, la gasolina, la droga y lo que sea. Propaganda pura. Y como ahí no manda Maduro, es Cabello el ejecutor del show.
Mientras tanto veamos un poco de la televisión militar TVerde, la boliplomo. Bolivariana, pacífica y armada. Una espectacular programación: 5 am. Diana Carabobo. 5:55 am. El comandante canta Patria, Patria. 5:10 am. Diez Padrenuestro y dos Avemaría. 5:20 am. Ataque con cuchillo por la espalda y de noche. 6:50 am. Cocinando conejos y caimanes con el coronel Morcilla. 7:00 am. Tiro al blanco. Uso humanitario del FAL y la granada. 7:30 am. Bombardeo con Napalm. 8:00 am. Cortar la yugular con eficiencia. 9:00 am. Misiles aire-tierra. 10:00 am. En la frente con la mira telescópica. 11:00 a.m. Siembra de minas unipersonales en ciudades y campos. 12:30 pm. Sierra Maestra, donde nacieron los dioses. 1:30 pm. Cadena con lo que sea. 6:30 pm. Dormir en Cuartel. 7:30 pm. Tápame que tengo frío.
Tiempos de paz. Sin duda.
Cosas de la revolución. Son así y no tienen remedio. En los últimos días a Diosdado Cabello, cabeza visible del ala militar del clan que gobierna el país desde la muerte del comandante eterno, pero que ya no está; le ha dado por avanzar en su promoción personal y en hacer ver quién es el que de verdad manda (el club de mando son seis y dos son cubanos). En esa tarea se montó en el asunto de la inseguridad, la guerra económica y el contrabando de extracción en la frontera, un área en la que solo el jefe de los militares, como es Cabello, podría actuar sin que le quemaran la bacinilla. Todo el país sabe que desde hace muchísimos años, más que los 15 de esta estafa mentada revolución, los militares que controlan las fronteras son los mismos que controlan y administran el contrabando. Esto lo hacen a la vista de todos desde los tiempos de Pérez Jiménez. Son los amos de ese negocio, ahora más rentable que nunca. Y para poder hacer propaganda con las operaciones de Arreaza y el propio Cabello había que anunciarle al país que la honesta revolución había tenido el atrevimiento de sacar del negocio a un montón de militares que ni juicio tendrán. Irán a otro destino a seguir acumulando barrigas y chapitas. Pura propaganda. Hay demasiada plata y demasiada experticia en esos verdes para abandonar eso así no más. Simplemente entra otra gerencia a trabajar con el otro lado para seguir pasando la carne, la harina, la gasolina, la droga y lo que sea. Propaganda pura. Y como ahí no manda Maduro, es Cabello el ejecutor del show.
Mientras tanto veamos un poco de la televisión militar TVerde, la boliplomo. Bolivariana, pacífica y armada. Una espectacular programación: 5 am. Diana Carabobo. 5:55 am. El comandante canta Patria, Patria. 5:10 am. Diez Padrenuestro y dos Avemaría. 5:20 am. Ataque con cuchillo por la espalda y de noche. 6:50 am. Cocinando conejos y caimanes con el coronel Morcilla. 7:00 am. Tiro al blanco. Uso humanitario del FAL y la granada. 7:30 am. Bombardeo con Napalm. 8:00 am. Cortar la yugular con eficiencia. 9:00 am. Misiles aire-tierra. 10:00 am. En la frente con la mira telescópica. 11:00 a.m. Siembra de minas unipersonales en ciudades y campos. 12:30 pm. Sierra Maestra, donde nacieron los dioses. 1:30 pm. Cadena con lo que sea. 6:30 pm. Dormir en Cuartel. 7:30 pm. Tápame que tengo frío.
Tiempos de paz. Sin duda.
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