En: http://www.lapatilla.com/site/2011/08/22/angel-garcia-banchs-las-reservas-internacionales-algo-nos-esconden/
Angel García Banchs
Una cosa queda clara sobre las reservas internacionales: el Gobierno algo nos esconde.
Resulta muy alarmante que el Gobierno tema que le congelen las reservas como a Libia, pues ello hace pensar que las autoridades saben algo que el resto del país desconoce, o que esperan acontecimientos futuros que las pongan riesgo, afectando la economía y la paz nacional.
También, preocupa que el traspaso de divisas a “países amigos” siga una lógica política, no económica; en particular, reubicar el oro en Venezuela tendrá costos transaccionales (e.g. costos de transporte frecuentes), y lo hará mucho menos líquido: no es lo mismo tener el oro en plazas como Nueva York y Londres que en Caracas o Maracaibo. Igualmente, en relación a la reubicación de nuestras reservas en divisas en China o Rusia, hay que decir que esos países suelen mantener sus reservas en los lugares que hoy el Gobierno quiere reemplazar; nuestras divisas seguirán exactamente en el mismo lugar, sólo que cambiará ahora la tenencia y nombre jurídico de quienes las mantendrán.
Claro que, por lo anterior, China y Rusia, custodios de nuestras reservas cobrarán algo, reduciendo la renta neta de nuestras posiciones en divisas. Pero, más aún preocupa que, ahora nuestras divisas queden bajo el control directo de nuestros acreedores principales vía préstamos opacos, ilegales, y ante todo, no aprobados por la Asamblea Nacional (préstamo chino, ruso, etc.). En este sentido, una explicación de la reubicación sería la urgencia de substituir el endeudamiento transparente y titularizado por préstamos, al margen de las leyes y del control parlamentario.
Igualmente, preocupa que el traspaso de nuestras reservas en divisas conduzca a un aumento de nuestro riesgo país, y del cambio implícito de las operaciones con títulos, colocando presión al alza de los precios de nuestra canasta de bienes importados.
Nuestras reservas internacionales alcanzan tan sólo unos 3,5 meses de cobertura de la demanda total de divisas anual, o un 13% del PIB, mientras alcanzaban, respectivamente, 16,2 meses en 1975 y 45% del PIB en 1984. La política de substitución creciente de las reservas en divisas por reservas en oro no tiene sentido; China, país al que confiaremos nuestras reservas en divisas, tiene en reservas el equivalente a 3,3 billones de dólares, de los cuales mantiene en oro sólo un 0,15% y en divisas el restante 99,85%. Lamentablemente, la parte operativa de las reservas viene disminuyendo desde 1999, al pasar de unos 10,5 mil millones de dólares, o un 75% del total, en febrero del año 1999, a tan solo 6,3 mil millones, o 22% del total, en la actualidad.
Entregarán el país con la industria petrolera y eléctrica en el piso, totalmente endeudado, y sin mayores reservas; pero, lo recuperaremos.
No comments:
Post a Comment