JORDY ENRIQUE MONCADA CARTAYA | EL UNIVERSAL
viernes 22 de julio de 2011 12:47 PM
Mejor te invento Presidente, así como decía Mario.
Mientras te recuperas, si es que necesitas recuperación, mejor te invento. No necesito que todos los días traten de endiosarte, porque tú mismo te volviste humano al decirnos que estabas enfermo, así como te volviste humano cuando inmerso en el miedo dejaste el Gobierno, así como inmerso en el miedo te entregaste aquel 4 de febrero.
Pero mientras las cosas naturalmente fracasen, mientras tus promesas se vayan por la borda, mientras tu intención de sobornar la esperanza, mientras juegues a construir casas por televisión, mientras la gente siga en la pobreza, mientras tanto te recordaré, porque no podrás evadir la culpa cobardemente detrás de una enfermedad.
Quienes hoy te rinden pleitesía también son culpables, pero el fracaso de jugar con la esperanza venezolana no podrás evadirlo desde Cuba, con cadenas penosas y personalistas que intentan mostrarte como un mártir. Aunque intentes manipular como siempre, la salud no es algo con lo que se juega, deberías entenderlo.
Cuando trates de hablar desde la Isla del Olvido, cuando nos cuentes que te recuperas y que ya no gritas muerte sino vida, aquí seguirán muriendo jóvenes inocentes que nada tendrán que ver con tu enfermedad si es que existe, aquí seguiremos llorando a los que se van e inventando a los que ya se fueron.
Mejor te invento Presidente, porque cada domingo no estaremos pendiente de si mandas a meter preso a alguna mujer inocente o si te dan aquellos arranques de despedir a trabajadores por cadena nacional o peor aún no estaremos pendiente de que te inventes un Ministerio para decir que acabas con los problemas.
Pero sí estaremos para recordarte cuando fundemos una nueva Venezuela, sin lemas excluyentes, agresivos y sobre todo estúpidos, cuando los jóvenes podamos progresar sin arrodillarnos, cuando tu vida sea vida, pero sea un recuerdo y no la noticia que nos obligan a ver a todos.
Como lo que haces mientras no eres nuestro presidente no me importa, mejor te invento Presidente.
Como no tendremos información real de tu salud, mejor te invento Presidente.
Como estás lejos y no quiero que regreses, mejor te invento Presidente.
"Sé qué polvos trajeron estos lodos, pero saberlo no es la mejor suerte. Inventaré quién eres, de todos modos inventarte es mi forma de creerte".
Mientras te recuperas, si es que necesitas recuperación, mejor te invento. No necesito que todos los días traten de endiosarte, porque tú mismo te volviste humano al decirnos que estabas enfermo, así como te volviste humano cuando inmerso en el miedo dejaste el Gobierno, así como inmerso en el miedo te entregaste aquel 4 de febrero.
Pero mientras las cosas naturalmente fracasen, mientras tus promesas se vayan por la borda, mientras tu intención de sobornar la esperanza, mientras juegues a construir casas por televisión, mientras la gente siga en la pobreza, mientras tanto te recordaré, porque no podrás evadir la culpa cobardemente detrás de una enfermedad.
Quienes hoy te rinden pleitesía también son culpables, pero el fracaso de jugar con la esperanza venezolana no podrás evadirlo desde Cuba, con cadenas penosas y personalistas que intentan mostrarte como un mártir. Aunque intentes manipular como siempre, la salud no es algo con lo que se juega, deberías entenderlo.
Cuando trates de hablar desde la Isla del Olvido, cuando nos cuentes que te recuperas y que ya no gritas muerte sino vida, aquí seguirán muriendo jóvenes inocentes que nada tendrán que ver con tu enfermedad si es que existe, aquí seguiremos llorando a los que se van e inventando a los que ya se fueron.
Mejor te invento Presidente, porque cada domingo no estaremos pendiente de si mandas a meter preso a alguna mujer inocente o si te dan aquellos arranques de despedir a trabajadores por cadena nacional o peor aún no estaremos pendiente de que te inventes un Ministerio para decir que acabas con los problemas.
Pero sí estaremos para recordarte cuando fundemos una nueva Venezuela, sin lemas excluyentes, agresivos y sobre todo estúpidos, cuando los jóvenes podamos progresar sin arrodillarnos, cuando tu vida sea vida, pero sea un recuerdo y no la noticia que nos obligan a ver a todos.
Como lo que haces mientras no eres nuestro presidente no me importa, mejor te invento Presidente.
Como no tendremos información real de tu salud, mejor te invento Presidente.
Como estás lejos y no quiero que regreses, mejor te invento Presidente.
"Sé qué polvos trajeron estos lodos, pero saberlo no es la mejor suerte. Inventaré quién eres, de todos modos inventarte es mi forma de creerte".
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