De acuerdo con cálculos de la Mesa de la Unidad Democrática, ya van 126 días de atraso del proceso de solicitud del referéndum revocatorio por las trabas burocráticas del Consejo Nacional Electoral.
Que el lunes los rectores pospusieran de nuevo la discusión del informe de la Junta Nacional Electoral sobre la recolección de las firmas de 20% de los electores retrasó cinco días el proceso, pues la información al respecto se debió presentar el 16 de septiembre, como prometió la presidente del organismo, Tibisay Lucena.
Estos cinco nuevos días de retraso complican aún más la posibilidad de hacer el revocatorio este año, ya que podrían demorar la recolección del 20%, sugerida para el último fin de semana de octubre (aunque no se ha fijado el día), que ahora podría postergarse para el jueves 3 de noviembre (hasta el sábado 5).
Inmediatamente después de la recolección, de acuerdo con la información de Lucena, empezaría un proceso de 28 o 29 días en el que el CNE “verificará actas, procedencia de manifestaciones y la convocatoria”.
Si el CNE se toma esos 29 días, el revocatorio podría convocarse el 3 de diciembre. Ante esa posibilidad, para que sea este año debe organizarse en un par de semanas.
Pero, de acuerdo con las Normas para la Promoción y Solicitud de Referendos Revocatorios, el CNE tiene 15 días hábiles para “verificar y cuantificar” las firmas, por lo que –incluso si se retrasa la recolección para el 3 de noviembre– a más tardar el 25 de noviembre se debería convocar la consulta. Igual habría que organizar la elección en menos de un mes.
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