Un nuevo gobierno requerirá de una narrativa que lo conecte emocionalmente con el pueblo
GERVER TORRES | EL UNIVERSAL
domingo 22 de julio de 2012 12:00 AM
Hoy les hago una invitación. Agarren papel y lápiz, y listen los principales problemas a los cuales deberá enfrentarse un nuevo gobierno en Venezuela. Piensen en la magnitud de cada uno de ellos y en las opciones para enfrentarlos. Jerarquícenlos. Aquí listo solo algunos.
¿Cómo se pone en marcha la reunificación del país, teniendo en cuenta que posiblemente, el chavismo en la oposición mantendrá un discurso incendiario y divisionista?
¿Cómo se aborda la reinstitucionalización de la Fuerza Armada?
¿Por dónde y cómo iniciar la recuperación del Poder Judicial, totalmente partidizado hoy?
¿Cómo enfrentar el narcotráfico, que ha formado grupos y redes de poder muy fuertes en organizaciones claves del país?
¿Cómo desarmar la enorme cantidad de civiles que generan graves problemas de seguridad?
¿Por dónde comenzar la recuperación de Pdvsa?
¿A qué velocidad y en qué secuencia desmantelar los innumerables controles establecidos; en particular, el control cambiario?
¿Que hacer con las empresas estatizadas, que funcionan ahora mucho peor de lo que lo hacían antes?
¿Cómo recuperar la inversión privada? ¿Cómo dotarse de los recursos humanos, tecnológicos y financieros para enfrentar todos los problemas mencionados?
La cantidad y complejidad de los problemas que tendrá que enfrentar un nuevo gobierno es tal, que requerirá, no solo de respuestas técnicamente solidas para cada uno de ellos, sino más importante aún, de un discurso muy inspirador, de una narrativa poderosa que lo conecte emocionalmente con el grueso de la población, de manera tal que cuente con el voto de confianza y el tiempo necesario para resolverlos. Si el nuevo gobierno intenta consolidarse solo a partir de una propuesta tecnocrática, de resolución de problemas, sin contar con esa narrativa, posiblemente no logre hacerlo. En ese sentido, asegurar esa narrativa es la primera condición para enfrentar los problemas de la transición.
¿Cómo se pone en marcha la reunificación del país, teniendo en cuenta que posiblemente, el chavismo en la oposición mantendrá un discurso incendiario y divisionista?
¿Cómo se aborda la reinstitucionalización de la Fuerza Armada?
¿Por dónde y cómo iniciar la recuperación del Poder Judicial, totalmente partidizado hoy?
¿Cómo enfrentar el narcotráfico, que ha formado grupos y redes de poder muy fuertes en organizaciones claves del país?
¿Cómo desarmar la enorme cantidad de civiles que generan graves problemas de seguridad?
¿Por dónde comenzar la recuperación de Pdvsa?
¿A qué velocidad y en qué secuencia desmantelar los innumerables controles establecidos; en particular, el control cambiario?
¿Que hacer con las empresas estatizadas, que funcionan ahora mucho peor de lo que lo hacían antes?
¿Cómo recuperar la inversión privada? ¿Cómo dotarse de los recursos humanos, tecnológicos y financieros para enfrentar todos los problemas mencionados?
La cantidad y complejidad de los problemas que tendrá que enfrentar un nuevo gobierno es tal, que requerirá, no solo de respuestas técnicamente solidas para cada uno de ellos, sino más importante aún, de un discurso muy inspirador, de una narrativa poderosa que lo conecte emocionalmente con el grueso de la población, de manera tal que cuente con el voto de confianza y el tiempo necesario para resolverlos. Si el nuevo gobierno intenta consolidarse solo a partir de una propuesta tecnocrática, de resolución de problemas, sin contar con esa narrativa, posiblemente no logre hacerlo. En ese sentido, asegurar esa narrativa es la primera condición para enfrentar los problemas de la transición.
No comments:
Post a Comment