JOSÉ ALBERTO RUGELES M. | EL UNIVERSAL
miércoles 28 de noviembre de 2012 12:00 AM
Hoy 28 de noviembre el expresidente Ramón J. Velásquez arriba hoy a la provecta edad de los noventa y seis años.
Sus amigos -incontables- , sus hijos, nietos y bisnietos y sus compatriotas nos alegramos por este nuevo cumpleaños. Velásquez es de esos robles cuya existencia es para los demás motivo de esperanza y seguridad. Representa un tipo de político, de escritor, de historiador, que sigue teniendo vigencia a pesar del paso del calendario.
Hace unos días atrás -en medio del otoño español- releía las páginas de "La caída del Liberalismo Amarillo" -aquel "libro épico" para usar la expresión de Augusto Mijares- una de las obras más importantes de Velásquez. Y pensaba cómo tiene actualidad su análisis del modo de ser del venezolano. Creo que bien harían muchos de los dirigentes políticos, sociales y empresariales de la actualidad leer esas páginas.
Como recientemente afirmara el Papa Benedicto XVI: "Los ancianos son un valor para la sociedad, sobre todo, para los jóvenes. No es posible el verdadero crecimiento humano y educación sin un contacto fecundo con los ancianos porque su existencia es como un libro abierto en el cual las jóvenes generaciones pueden encontrar indicaciones valiosas para el camino de la vida".
Vaya junto a nuestra felicitación, nuestros mejores deseos para el ilustre "roble" que continúa en pie.
¡¡¡ Auguri, Presidente, ad multos anos!!!
Sus amigos -incontables- , sus hijos, nietos y bisnietos y sus compatriotas nos alegramos por este nuevo cumpleaños. Velásquez es de esos robles cuya existencia es para los demás motivo de esperanza y seguridad. Representa un tipo de político, de escritor, de historiador, que sigue teniendo vigencia a pesar del paso del calendario.
Hace unos días atrás -en medio del otoño español- releía las páginas de "La caída del Liberalismo Amarillo" -aquel "libro épico" para usar la expresión de Augusto Mijares- una de las obras más importantes de Velásquez. Y pensaba cómo tiene actualidad su análisis del modo de ser del venezolano. Creo que bien harían muchos de los dirigentes políticos, sociales y empresariales de la actualidad leer esas páginas.
Como recientemente afirmara el Papa Benedicto XVI: "Los ancianos son un valor para la sociedad, sobre todo, para los jóvenes. No es posible el verdadero crecimiento humano y educación sin un contacto fecundo con los ancianos porque su existencia es como un libro abierto en el cual las jóvenes generaciones pueden encontrar indicaciones valiosas para el camino de la vida".
Vaya junto a nuestra felicitación, nuestros mejores deseos para el ilustre "roble" que continúa en pie.
¡¡¡ Auguri, Presidente, ad multos anos!!!
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