A pesar de las rigurosas medidas de seguridad, con escoltas y soldados fuertemente armados, el presidente Maduro se consiguió con una protesta de venezolanos residentes en Trinidad, que envolvieron en papel toilette y gritaron consignas contra su gobierno.
Por
Redacción.-
Con un contingente de 90 miembros, que consistió
principalmente en el personal de seguridad y los medios de comunicación
cercanos al gobierno, el presidente Maduro llegó a llegó a Trinidad más
cuidado que Barack Obama.
Las medidas de seguridad que se
implementaron antes de la llegada de Maduro a la casa del Presidente
Anthony Carmona, incluyó soldados fuertemente armados y policías que
ocuparon puestos estratégicos en los alrededores de la residencia.
Tres representantes de la prensa
presidencial de Maduro llegaron una hora antes de él a la casa del
Presidente: dos camarógrafos y una reportera, la cual a través de un
intérprete, tomó nota de los nombres y denominaciones de los reporteros
locales y los medios de comunicación presentes. La reportera explicó
que eso les ayudaría a presentar un informe al regresar a Venezuela.
Escoltado por varios hombres y otros funcionarios de seguridad, Maduro y su esposa llegaron en camionetas separadas.
Aunque camarógrafos y fotógrafos fueron
autorizados a presenciar el encuentro, a los periodistas locales no les
fue permitido entrar, mientras que toda la delegación de medios de
Maduro se acomodó en la estrechez.
Al finalizar el encuentro, la delegación de
Maduro fue escoltado fuera de la entrada más cercana de la Reina Hall
porque un grupo de venezolanos residentes en Trinidad estaban afuera
realizando una protesta ruidosa para resaltar su descontento por la
presencia de Maduro. Los manifestantes se cubrieron el rostro con papel
toilette, una imagen que reprodujeron dos de los tres medios mas
importantes de Trinidad y Tobago.
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