ORIAN BRITO PEÑA| EL UNIVERSAL
sábado 21 de junio de 2014 12:00 AM
Indudablemente la carta de Jorge Giordani es el tema obligado en la opinión pública venezolana durante las últimas horas, un funcionario que tras ser desenchufado de los cargos que ostentó por varios años, decidió hacer públicas sus diferencias con el actual presidente de la República, Nicolás Maduro.
A pesar de su postura de rechazar la forma como se está "conduciendo" el país, hay que estar conscientes de que Jorge Giordani fue el ejecutor de las cinco devaluaciones del bolívar en los 10 años de existencia del control cambiario; analistas económicos consideran que Giordani (quien estuvo en la revolución bolivariana desde sus inicios) es uno de los responsables de la escasez de productos básicos y de la inflación de 60,9% que registra Venezuela, un país con las mayores reservas petroleras mundiales.
Ese aspecto de su legado al frente del área económica es omitida por loas al expresidente Hugo Chávez Frías, en un vago intento por ignorar su responsabilidad frente al descalabro financiero que enfrenta Venezuela. Si nos tocase parafrasear parte de la misiva, podría simplificarse a un: "Yo sé que las cosas se estaban haciendo mal, pero había que hacerlas así".
Liderazgo
Giordani sostiene que bajo la "dirección" de Nicolás Maduro no hay liderazgo, textualmente dice: "Resulta doloroso y alarmante ver una presidencia que no transmite liderazgo, y que parece querer afirmarlo en la repetición, sin la debida coherencia, de los planteamientos". Sorpresivamente después de su salida es cuando el exministro se percata de la situación aun cuando estuvo al frente de las medidas económicas que ha anunciado Maduro desde que controla el poder.
Uno de los requisitos para estar en las esferas del poder revolucionario es asumir de manera casi profesional, una actitud marcada por cinismo y por irresponsabilidad; en un país con instituciones serias habrían citado al exministro Giordani para conocer el trasfondo de sus planteamientos, los cuales provocan más inquietud por parte de los ciudadanos, quienes ajenos a lo que ocurre internamente en el Poder Ejecutivo pensarán: "Si Giordani dice eso, qué otras cosas no ocurrirán... ".
División
Sin necesidad de consultarlo con falsos profetas, existe una división dentro del Gobierno, la forma testaruda con la que Nicolás Maduro pretende controlar lo que seguro percibe como su hacienda, empieza a molestar a figuras clave del proceso revolucionario, pero mientras estén enchufados algunos preferirán por asumir la misión Poncio Pilato en sus intentos por pasar desapercibidos ante la responsabilidad de muchos por la debacle en la que sumergieron a Venezuela, sacrificando su presente y su futuro.
Dios le dé mucha salud al exministro Jorge Giordani para que en algún momento (esperamos no muy lejano) rinda cuentas por su nefasto trabajo.
A pesar de su postura de rechazar la forma como se está "conduciendo" el país, hay que estar conscientes de que Jorge Giordani fue el ejecutor de las cinco devaluaciones del bolívar en los 10 años de existencia del control cambiario; analistas económicos consideran que Giordani (quien estuvo en la revolución bolivariana desde sus inicios) es uno de los responsables de la escasez de productos básicos y de la inflación de 60,9% que registra Venezuela, un país con las mayores reservas petroleras mundiales.
Ese aspecto de su legado al frente del área económica es omitida por loas al expresidente Hugo Chávez Frías, en un vago intento por ignorar su responsabilidad frente al descalabro financiero que enfrenta Venezuela. Si nos tocase parafrasear parte de la misiva, podría simplificarse a un: "Yo sé que las cosas se estaban haciendo mal, pero había que hacerlas así".
Liderazgo
Giordani sostiene que bajo la "dirección" de Nicolás Maduro no hay liderazgo, textualmente dice: "Resulta doloroso y alarmante ver una presidencia que no transmite liderazgo, y que parece querer afirmarlo en la repetición, sin la debida coherencia, de los planteamientos". Sorpresivamente después de su salida es cuando el exministro se percata de la situación aun cuando estuvo al frente de las medidas económicas que ha anunciado Maduro desde que controla el poder.
Uno de los requisitos para estar en las esferas del poder revolucionario es asumir de manera casi profesional, una actitud marcada por cinismo y por irresponsabilidad; en un país con instituciones serias habrían citado al exministro Giordani para conocer el trasfondo de sus planteamientos, los cuales provocan más inquietud por parte de los ciudadanos, quienes ajenos a lo que ocurre internamente en el Poder Ejecutivo pensarán: "Si Giordani dice eso, qué otras cosas no ocurrirán... ".
División
Sin necesidad de consultarlo con falsos profetas, existe una división dentro del Gobierno, la forma testaruda con la que Nicolás Maduro pretende controlar lo que seguro percibe como su hacienda, empieza a molestar a figuras clave del proceso revolucionario, pero mientras estén enchufados algunos preferirán por asumir la misión Poncio Pilato en sus intentos por pasar desapercibidos ante la responsabilidad de muchos por la debacle en la que sumergieron a Venezuela, sacrificando su presente y su futuro.
Dios le dé mucha salud al exministro Jorge Giordani para que en algún momento (esperamos no muy lejano) rinda cuentas por su nefasto trabajo.
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