Gustavo Coronel
Hace
pocas horas se concretó otra entrega de activos nacionales por parte de
PDVSA a un país extranjero. Se trata de la venta de petróleo, mediante
el “pago anticipado” de unos dos mil millones de dólares, a la empresa
petrolera rusa Rosneft, la cual recibiría de PDVSA unos 64 millones de
barriles de petróleo crudo y derivados en los próximos cinco años. Lo
primero que se advierte es que el dinero recibido por PDVSA equivale a
un precio por barril de apenas $31, la tercera parte de su valor actual.
No sabemos si el dinero es un pago parcial y, si lo es, cuan parcial.
Se desconoce el precio por barril estipulado en el convenio.
Lo
importante de esta transacción es que viene en los mismos días de
convenios de PDVSA con empresas contratistas grandes del sector
petrolero como Schlumberger, Halliburton y Weatherford, mediante los
cuales la empresa recibe otros dos mil millones de dólares para
“operaciones” no especificadas.
En
paralelo, PDVSA ha estado recibiendo cuantiosos adelantos de China y
préstamos de Japón, de ENI y de ChevronTexaco por sumas que sobrepasan
los $30.000 millones en los últimos años. Además está emitiendo deuda
con mucha frecuencia, la última emisión de bonos de $5000 millones hace
apenas dos semanas. El monto total de bonos emitidos ronda los $40.000
millones. En adición la empresa ha recibido, en bolívares inorgánicos
del Banco Central de Venezuela, el equivalente de otros $40.000 millones
para sus gastos corrientes.
Aún
para el observador menos ducho en asuntos financieros es evidente que
PDVSA se está endeudando hasta los tuétanos. En paralelo, José Guerra
estima que el país está en virtual cesación de pagos, con una deuda a
suplidores diversos que monta a unos $14.348 millones, ver http://www.soberania.org/2014/05/23/senores-no-hay-plata/ :
No
es difícil advertir que, al ser PDVSA la única empresa generadora de
dólares para el régimen, esta deuda que se ve arriba, solo podría ser
pagada con dólares petroleros de esta empresa, bien sea a través de
ingresos de venta de petróleo o endeudándose. Esto explica el
desesperado proceso actual de liquidación de nuestros activos
nacionales.
Guerra estima la deuda nacional, para fines de 2013, en unos $200.000 millones. De ese total, una gran porción no conocida por el país, probablemente unos $130.000 millones, debe corresponder a deuda en cabeza de PDVSA. Pero hay compromisos a mediano plazo que agravan aún más la situación. Los arbitrajes contra PDVSA ya perdidos, los relacionados con ExonMobil y ConocoPhillips, están por adjudicarse y pudieran montar a unos $10.000 millones. Venezuela es el país con más demandas internacionales en proceso, superando ya a Argentina.
Como
se verá, el cuadro financiero de PDVS es desesperado. Y los insensatos
del régimen continúan regalando petróleo, esta vez a Palestina. El
analista Sergio Sáez nos dice: “la
República en su afán de contar con solidaridades políticas de países
vecinos, le ha impuesto a PDVSA, compromisos de suministrar petróleo y
productos, en condiciones de precio, pago y financiamiento,
desfavorables, como por ejemplo: a los países firmantes de los Acuerdos
Energéticos de San José, ALBA, Petrocaribe, Acuerdo de Cooperación
Energética de Caracas (ACEC), Convenio Integral de Cooperación (18.000 barriles diarios de petróleo y productos); Convenio de Cooperación Integral Cuba - Venezuela (110.000 barriles diarios de petróleo y $ 1.090 millones); y por préstamos, líneas de crédito y financiamiento, cuyo servicio de la deuda se paga con petróleo y productos, con China (130.000 barrils diarios de fuel Oil y 270.000 barriles diarios de petróleo crudo), Portugal, Irán, Belorús y Japón (100.000 barrules diarios de petróleo y/o productos); para un total de 1.266.000 barriles diarios de petróleo y productos, que no generan ingresos a la Caja de PDVSA…. quedándole a PDVSA un remanente de 985.000 barriles diarios [para exportación], de los cuales tiene comprometido con China un saldo de 25.000 barriles diario (en
las mismas condiciones contractuales que el pago del servicio de la
deuda); con CITGO 190.000 barriles diarios , y 400.000 barriles diarios a
la India”. Comunicación Personal.
Como
podrá verse, PDVSA ya no tiene de donde sacar más dinero, por lo cual
se ve obligada a convertirse en la mayor limosnera del sector petrolero
internacional. Ya tiene la mayor deuda del planeta entre las empresas
petroleras y esa deuda sigue creciendo. En realidad, la deuda acumulada
excede el valor de sus activos y, como hemos visto, está empeñando
petróleo que no le pertenece a ella como empresa sino a la nación.
Creo
sinceramente, como ciudadano venezolano, que PDVSA debe ser intervenida
de inmediato, sus directivos despedidos, investigados y enjuiciados por
manirrotismo, ineptitud y traición a la patria. Esta intervención no
puede darse desde el gobierno porque el gobierno es su principal
cómplice en este monumental saqueo. Quien debe intervenir es la nación,
representada por la Sociedad Civil.
Y,
como puede hacerlo? La única arma que veo posible es una huelga
general indefinida que obligue a la renuncia del gobierno, posiblemente
con ayuda de una cordial “recomendación” de la Fuerza Armada
institucional (si es que algo queda de ella). El país está enfrentado a
una gran decisión: morir de mengua o expulsar al malandraje del poder.
Un diálogo con esta gente debe ser rechazado con decisión por la
Sociedad Civil venezolana.
Golpe? No. Restitución de la primacía constitucional. Golpe es el que nos da todos los días el malandraje.
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