GUILLERMO GARCÍA | EL UNIVERSAL
domingo 8 de julio de 2012 04:21 PM
Esta pregunta se la hacen una mayoría de venezolanos en los actuales momentos, y muchos economistas, industriales y el mercado, tratan de predecir lo que pudiese ocurrir luego de conocerse los resultados del domingo 7 de octubre. Sin duda, el resultado de los comicios tendrá un efecto sobre las posibles decisiones que pudiese tomar el Ejecutivo en el año 2013. De ser Henrique Capriles el nuevo Presidente; el factor político, aunque de peso para las decisiones futuras, no será el único factor determinante en las medidas a ser implementadas.
La complicada situación económica que sufre la economía venezolana, en un escenario internacional con un menor crecimiento, impactará los niveles de ingresos del país tanto por los ingresos petroleros, como los ingresos fiscales producto de una reducción en la recaudación de impuestos del sector petrolero y no petrolero, debido al menor crecimiento de los precios de exportación y regalías, como de nuestra economía en los diferentes sectores económicos privados sumidos en un profundo proceso de deterioro y distorsión con una alta inflación. Ante estas situaciones, el nuevo gobierno de Henrique Capriles tendrá una dura tarea de poner orden en los desequilibrios económicos existentes, al mismo tiempo que crea las condiciones mínimas necesarias para dar impulso y generar empleo.
Medidas que recomiendo
Cese de invasiones y confiscaciones a la propiedad privada, dando el Ejecutivo garantías por Decreto Presidencial.
Convocatoria al Diálogo nacional con los empresarios para crear las condiciones para el aumento de la inversión y la producción. Levantamiento progresivo y administrado de los controles de precios, en cooperación directa con la industria para sincerar los precios de bienes, especialmente alimentarios.
"Prioridad alimentaria Venezuela" impulsada completamente por los factores productivos y empresariales venezolanos.
Medidas e incentivos para el aumento de producción y crecimiento económico.
Impulso decidido a la construcción de viviendas e infraestructura con la búsqueda sin complejo del sector privado. Crear los incentivos: banco de tierras, reducción de los tiempos de permisología, financiamiento a través de la titularización de hipotecas y posible establecimiento del "Bono Vivienda Promotor" que he planteado en varias oportunidades. Creación de Fondos de Inversión Inmobiliarios.
Reordenamiento del presupuesto nacional reduciendo gasto corriente, y orientándolo a gasto de inversión.
Establecimiento de medidas cambiarias, fiscales y monetarias orientadas al control de la inflación y el manejo de la deuda a través de un BCV con autonomía plena.
Establecimiento de un esquema de cambio dual para importaciones fuera de los sectores de alimentos; salud; bienes de capital y equipos para la industria. Este esquema sería establecido a través de la Bolsa de Valores, con la implementación del "Venedólar" (Bonos de deuda en dólares). Tanto los inversionistas privados, bancos, como Entes del Estado participarían como agentes del mercado.
Establecer el esquema de Conversión de Deuda en Capital (Debt Equity Swap) Mediante esta Ley ( ya promulgada), se aprovecha los bajos niveles de precios que registra la deuda de Venezuela en los mercados internacionales, de esta manera los inversionistas pueden aplicar los títulos comprados a inversión directa en las áreas productivas de la economía. El BCV seria el encargado de recibir y convertir a bolívares al valor nominal dichos títulos. Esto incentivaría la inversión en el país, al mismo tiempo que reduce el nivel de deuda externa.
Reducción del encaje bancario actual para potenciar el crédito y remuneración por el BCV de este encaje.
Establecimiento de un programa de privatización a través del mercado de valores, donde todos los venezolanos puedan participar como accionistas.
Evaluación de un programa de recompra de bonos con vencimiento próximo, aprovechando el descuento importante que aplica el mercado. El producto del ahorro se destinaría a gastos de inversión.
Detener los programas de cooperación internacional que no compensan al país, (Petrocaribe); compras de armamento y programas de nacionalización de empresas.
Estas son algunas de las medidas que el Ejecutivo debería evaluar su implementación, en la búsqueda de enfrentar no solo la difícil situación de la economía y las finanzas en el país, sino prevenir una crisis económica, financiera y social en Venezuela en los próximos años.
La complicada situación económica que sufre la economía venezolana, en un escenario internacional con un menor crecimiento, impactará los niveles de ingresos del país tanto por los ingresos petroleros, como los ingresos fiscales producto de una reducción en la recaudación de impuestos del sector petrolero y no petrolero, debido al menor crecimiento de los precios de exportación y regalías, como de nuestra economía en los diferentes sectores económicos privados sumidos en un profundo proceso de deterioro y distorsión con una alta inflación. Ante estas situaciones, el nuevo gobierno de Henrique Capriles tendrá una dura tarea de poner orden en los desequilibrios económicos existentes, al mismo tiempo que crea las condiciones mínimas necesarias para dar impulso y generar empleo.
Medidas que recomiendo
Cese de invasiones y confiscaciones a la propiedad privada, dando el Ejecutivo garantías por Decreto Presidencial.
Convocatoria al Diálogo nacional con los empresarios para crear las condiciones para el aumento de la inversión y la producción. Levantamiento progresivo y administrado de los controles de precios, en cooperación directa con la industria para sincerar los precios de bienes, especialmente alimentarios.
"Prioridad alimentaria Venezuela" impulsada completamente por los factores productivos y empresariales venezolanos.
Medidas e incentivos para el aumento de producción y crecimiento económico.
Impulso decidido a la construcción de viviendas e infraestructura con la búsqueda sin complejo del sector privado. Crear los incentivos: banco de tierras, reducción de los tiempos de permisología, financiamiento a través de la titularización de hipotecas y posible establecimiento del "Bono Vivienda Promotor" que he planteado en varias oportunidades. Creación de Fondos de Inversión Inmobiliarios.
Reordenamiento del presupuesto nacional reduciendo gasto corriente, y orientándolo a gasto de inversión.
Establecimiento de medidas cambiarias, fiscales y monetarias orientadas al control de la inflación y el manejo de la deuda a través de un BCV con autonomía plena.
Establecimiento de un esquema de cambio dual para importaciones fuera de los sectores de alimentos; salud; bienes de capital y equipos para la industria. Este esquema sería establecido a través de la Bolsa de Valores, con la implementación del "Venedólar" (Bonos de deuda en dólares). Tanto los inversionistas privados, bancos, como Entes del Estado participarían como agentes del mercado.
Establecer el esquema de Conversión de Deuda en Capital (Debt Equity Swap) Mediante esta Ley ( ya promulgada), se aprovecha los bajos niveles de precios que registra la deuda de Venezuela en los mercados internacionales, de esta manera los inversionistas pueden aplicar los títulos comprados a inversión directa en las áreas productivas de la economía. El BCV seria el encargado de recibir y convertir a bolívares al valor nominal dichos títulos. Esto incentivaría la inversión en el país, al mismo tiempo que reduce el nivel de deuda externa.
Reducción del encaje bancario actual para potenciar el crédito y remuneración por el BCV de este encaje.
Establecimiento de un programa de privatización a través del mercado de valores, donde todos los venezolanos puedan participar como accionistas.
Evaluación de un programa de recompra de bonos con vencimiento próximo, aprovechando el descuento importante que aplica el mercado. El producto del ahorro se destinaría a gastos de inversión.
Detener los programas de cooperación internacional que no compensan al país, (Petrocaribe); compras de armamento y programas de nacionalización de empresas.
Estas son algunas de las medidas que el Ejecutivo debería evaluar su implementación, en la búsqueda de enfrentar no solo la difícil situación de la economía y las finanzas en el país, sino prevenir una crisis económica, financiera y social en Venezuela en los próximos años.
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