Tuesday, October 9, 2012

El punto de no retorno

En: http://www.eluniversal.com/opinion/121009/el-punto-de-no-retorno

DÁMASO JIMÉNEZ |  EL UNIVERSAL
martes 9 de octubre de 2012  12:00 AM
El país que adversa y se opone al proyecto para radicalizar el socialismo fidelista en Venezuela acaba de recibir una nueva derrota, la número 14 en los últimos 15 procesos electorales ocurridos desde que Hugo Chávez llegara al poder en 1998.

El mandatario socialista se impuso el domingo con el 54 por ciento de los votos contra 44 de Capriles en un diferencial de un millón 400 mil votos, que terminó bastante lejos del cerrado episodio que mantuvo en alta tensión tanto a los rojos como a los opositores, que naufragaron por más de 8 horas en el mar de la incertidumbre sin idea real de los resultados. Al final el sabor de la derrota opositora recordó a muchos el limbo inexplicable del 2004 en otros tiempos no tan lejanos, pero eso es otro episodio.

Los 10 puntos porcentuales de ventaja que le sacó Chávez a Capriles pueden parecer una derrota abrumadora, pero en los anteriores comicios del 2006 contra Manuel Rosales, la victoria chavista fue lograda con un diferencial de 26 puntos y en el 2000 contra Francisco Arias Cárdenas fue de 22 puntos porcentuales, lo que quiere decir que la opción del otro ha dejado de ser un la de un majunche o escuálido, como lo ha restregado el máximo líder revolucionario durante todo este tiempo.

Lo que salió a relucir como boletín oficial indica que en el país hay una mayoría que apoya ciegamente al presidente Chávez y su plan para traspasar la barrera del no retorno y su papel protagónico para exportar la revolución bolivariana y construir una unión latinoamericana y caribeña de países, que no juegan otro rol que vivir bajo la sombra de nuestros ingresos petroleros por encima de la necesidad imperante del ciudadano de resolver problemas internos en materia económica, de seguridad, educación, salud, empleo y apagones ineptos asumidos por el propio jefe de Estado, quien prometió en campaña estar más pendiente de gobernar hacia adentro sin dejar de proyectarse hacia afuera, aunque suene como doble discurso.

Pero...  ¿Podrá imponerse ese punto de no retorno a 6 millones 400 mil venezolanos que usaron el voto para manifestar su rebeldía ante la manera como se viene haciendo las cosas en Venezuela, o imperará nuevamente el apartheid y el rechazo a todo aquel que piensa distinto al status quo establecido para gobernar de nuevo por otros 6 años más? ¿Hay dos países antagónicos que no se reconocen el uno al otro o vamos a pasar a una nueva etapa de reconocimiento con una oposición que también debe autoanalizarse y hacer planteamientos concretos en pro del beneficio del país?

Odios, insultos y descalificaciones aparte, el chavismo debe reconocer que Capriles se ha convertido en el líder más preclaro e indiscutible de la oposición.  El mejor candidato que ha enfrentado a Chávez con un proyecto importante para sacar adelante el país. Si toda esta odisea ha valido para algo, Chávez debería llamar a ese líder surgido en otra epopeya válida para un diálogo de buena voluntad y gobernar en paz para todo el país, para los que lo apoyan incondicionalmente y los que votamos en desacuerdo con sus políticas en estos últimos 14 años de gobierno.

La oposición también debe examinarse para no perder el capital electoral logrado, dejar los egoísmos y abrir oportunidades a nuevas opciones y partidos pequeños y reconocer que existe bajo la dimensión de una amalgama de minorías que han aprendido a convivir entre sí bajo la sombra de los grandes partidos a flote, y que muchos de esas organizaciones pequeñas reclaman casi en silencio una mayor participación en las decisiones internas de esa utopía de cristal llamada la unidad. Vienen otros comicios casi de forma inmediata y en cada una de las regiones la situación es distinta para los gobernadores y alcaldes.

No será fácil para nadie remontar esta cuesta en una de las naciones con mayor inflación y costo de la vida y el tercer en violencia e inseguridad del continente. En vez de fomentar el odio entre hermanos y vivir en el banal vacío de la chanza y la burla, es necesario cerrar filas ante el duro porvenir económico que se nos avecina con innumerables cuentas por pagar, desarticular las mafias que desde la industria petrolera acaban con el subsidio de los venezolanos y evitar esa confrontación armada que cuelga sobre nosotros como espada de Damocles, de la que nunca se sabe cuándo podrá detenerse y cuántas vidas podrá cobrar.

No comments:

Post a Comment