Saturday, December 27, 2014

Estertores del chavismo: dictadura militar o insurgencia ciudadana

En: Recibido por email, publicado en: www.lasarmasdecoronel.blogspot.com


Gustavo Coronel





Esto se viene abajo, no podía ser de otra manera. El presidente es un ex-chofer reposero del Metro de Caracas. El vicepresidente es incoloro y aburrido,  está allí solo por ser  yerno del difunto. La canciller (a) es Delcy Rodríguez, quien  ostenta como credencial única ser hermana del consentido de Smartmatic, Jorge Rodríguez.
Desaliñada Canciller
 Los embajadores de Venezuela ante la ONU son Rafael Ramírez y María Gabriela Chávez, también conocidos como el asesino de PDVSA y la reina del arroz.   Otros grotescos nombramientos  colocan a Tarek William Saab como Defensor del Pueblo y a Luisa Ortega Diaz, de nuevo, como la Fiscal General.  Entre los mencionados para el TSJ hay uno que otro con prontuario criminal. Para el CNE han sido confirmadas el par de arpías Oblitas y Lucena. Este es un equipo que no podría administrar ni siquiera la Cárcel del Rodeo, mucho menos un país.


 Una cara de hampón  que no la brinca un venado
Es una vergüenza que esta gente haya durado tanto en el poder, que no haya una sola institución venezolana que haya cumplido con su deber de intervenir esta costosa y cruel farsa.
Llama la atención la caída libre de Rafael Ramírez. Hace escasos meses era el Zar del petróleo, de la economía, de las viviendas, vocero en la OPEP. Ahora lo tendremos viviendo en suelo estadounidense, quizás más cercano a ser reo de la justicia internacional,  a pesar de su condición de diplomático. Quienes hemos sido recibidos por este gran país tendremos mejores oportunidades de hacerle saber personalmente lo que pensamos de él, si lo encontramos caminando por las calles de Nueva York. Rafael Ramírez tiene mucho por lo cual responder ante los venezolanos: fue el mayor destructor de PDVSA, cómplice de los inmensos manejos fraudulentos del FONDEN, artífice del endeudamiento nacional, protector de contratistas que se han enriquecido de manera obscena con el dinero de los venezolanos, encubridor de la patraña de la enfermedad y  “recuperación”  de Hugo Chávez, amiguito de Pastor Maldonado, investigado en Florida.  Su súbito desplazamiento probablemente tiene que ver con la lucha interna por el poder que se ha desatado en el régimen entre el maduro y  el podrido. Ramírez parecería ser una víctima indirecta del acercamiento cubano a USA.  Los Castro estarían alejándose  del chavismo, lo cual ha fortalecido el bando del podrido.
Mientras esta lucha interna se lleva a cabo entre el maduro y el podrido  la oposición se mantiene silenciosa, como cucaracha en baile de gallinas. En paralelo, no hay nadie en la Fuerza Armada que tenga la integridad y la decisión  para unirse al país indignado a fin de acabar  de una vez por todas con este régimen de oprobio, según lo impone la Constitución vigente.


 Con pandillas armadas y anárquicas en los barrios, narco-generales en desesperados intentos por conservar el poder, un presidente que nunca ha gobernado, un sargento Batista criollo ansioso por entrar a Miraflores, una oposición dividida entre quienes están dispuestos a irse a la calle y quienes hacen política como si estuviéramos en democracia, cualquier cosa es posible a corto plazo.  Es una situación de anomía que tiene dos probables salidas: una dictadura militar de narcotraficantes y analfabetas o una vigorosa insurgencia ciudadana que lleve a la recuperación de la democracia, libertad y dignidad perdidas.   

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