FRANCISCO RIVERO VALERA | EL UNIVERSAL
viernes 4 de noviembre de 2011 12:00 AM
Miedo y temor es lo mismo.
Y es la sensación desagradable que asusta al percibir el peligro real o virtual del presente, futuro y hasta del pasado. Su máxima expresión es el terror. Lutz, RAE.
Existen varios tipos de miedo.
El miedo biológico o adaptativo para lograr la supervivencia del ser humano, o de los animales.
El miedo neurológico como sistema de organización del cerebro.
El social y cultural, en la interrelación del carácter de la persona y la organización social.
Y el miedo psicológico como estado afectivo capaz de provocar ansiedad y angustia. Incluye el miedo neurótico, identificado por Freud cuando la intensidad del ataque de miedo no tiene ninguna relación con el peligro. Freud, De La Torre.
En Venezuela vivimos todos los tipos de miedo. Miedo a la delincuencia. Miedo a las amenazas del Gobierno. A las expropiaciones. A la altísima corrupción. A la inseguridad jurídica. A la impunidad. A la pésima proyección internacional del país.
Hasta los chavistas tienen miedo. De las primarias de la oposición venezolana. Miedo de que sea reeditada con Chávez la experiencia chilena de la derrota electoral de la dictadura de Pinochet en 1988, por la oposición unida. Y miedo de que la oposición venezolana pueda lograr su objetivo: acabar con el comunismo y rescatar nuestra democracia en el 2012.
El problema del miedo es tan grave que casi todos los chavistas ya están pasando del miedo al terror. De perder la teta en este Gobierno. De perder las elecciones en el 2012. De ser enjuiciados o exiliados por corrupción en el futuro gobierno democrático. O de ser excluidos en el nuevo gobierno, tipo lista Tascón.
Pero, el terror más grande de los chavistas es la enfermedad de Chávez. Que no pueda sobrevivir a su enfermedad hasta el 7 de octubre del 2012, día de las elecciones. Temor por su desaparición física y, con él, su robolución. Terror de pensar en las palabras proféticas o no, del chavista Carlos Ilich Ramírez, el Chacal, a la prensa francesa: en Venezuela basta una bala, para hacer caer la revolución. AFP, mayo 2010. O una enfermedad. Y terror por la desaparición definitiva del socialismo o comunismo del siglo XXI.
De paso, como el miedo impulsa a las personas a manifestarse con 3 tipos de respuesta: la huída, la paralización y el ataque o enfrentamiento, cualquier venezolano de mediana inteligencia puede darse cuenta de la actitud de enfrentamiento de los chavistas contra todo el mundo. Es la clara respuesta ofensiva, que más bien parece defensiva, de su miedo.
Y el miedo sería la razón para que Chávez y sus compinches descalifiquen a la oposición, ataquen al sistema democrático, al imperio, a la empresa privada; insulten públicamente a personas e instituciones, manipulen los poderes del Estado, usando más el poder que el derecho; y traten de imponer el comunismo en nuestro país, por las malas o por las malas. E inducen el terror en la población como estrategia de control político, a pesar de su mentor cuando dijo: el terror es, en su mayor parte, inútiles crueldades cometidas por miedo. Friedrich Engels.
O sea, en la Venezuela de hoy tenemos 2 escenarios: chavistas aterrorizados al pensar en las elecciones del 2012; y oposición y pueblo venezolano unidos, ensayando sin miedo la canción Hasta aquí te trajo el río, de José Miguel Class, que dice: hasta aquí te trajo el río/ y de aquí no vas a pasar.
Y con ñapa: si libertad es ausencia de miedo, en el 2012 seremos libres.
Amén.
Y es la sensación desagradable que asusta al percibir el peligro real o virtual del presente, futuro y hasta del pasado. Su máxima expresión es el terror. Lutz, RAE.
Existen varios tipos de miedo.
El miedo biológico o adaptativo para lograr la supervivencia del ser humano, o de los animales.
El miedo neurológico como sistema de organización del cerebro.
El social y cultural, en la interrelación del carácter de la persona y la organización social.
Y el miedo psicológico como estado afectivo capaz de provocar ansiedad y angustia. Incluye el miedo neurótico, identificado por Freud cuando la intensidad del ataque de miedo no tiene ninguna relación con el peligro. Freud, De La Torre.
En Venezuela vivimos todos los tipos de miedo. Miedo a la delincuencia. Miedo a las amenazas del Gobierno. A las expropiaciones. A la altísima corrupción. A la inseguridad jurídica. A la impunidad. A la pésima proyección internacional del país.
Hasta los chavistas tienen miedo. De las primarias de la oposición venezolana. Miedo de que sea reeditada con Chávez la experiencia chilena de la derrota electoral de la dictadura de Pinochet en 1988, por la oposición unida. Y miedo de que la oposición venezolana pueda lograr su objetivo: acabar con el comunismo y rescatar nuestra democracia en el 2012.
El problema del miedo es tan grave que casi todos los chavistas ya están pasando del miedo al terror. De perder la teta en este Gobierno. De perder las elecciones en el 2012. De ser enjuiciados o exiliados por corrupción en el futuro gobierno democrático. O de ser excluidos en el nuevo gobierno, tipo lista Tascón.
Pero, el terror más grande de los chavistas es la enfermedad de Chávez. Que no pueda sobrevivir a su enfermedad hasta el 7 de octubre del 2012, día de las elecciones. Temor por su desaparición física y, con él, su robolución. Terror de pensar en las palabras proféticas o no, del chavista Carlos Ilich Ramírez, el Chacal, a la prensa francesa: en Venezuela basta una bala, para hacer caer la revolución. AFP, mayo 2010. O una enfermedad. Y terror por la desaparición definitiva del socialismo o comunismo del siglo XXI.
De paso, como el miedo impulsa a las personas a manifestarse con 3 tipos de respuesta: la huída, la paralización y el ataque o enfrentamiento, cualquier venezolano de mediana inteligencia puede darse cuenta de la actitud de enfrentamiento de los chavistas contra todo el mundo. Es la clara respuesta ofensiva, que más bien parece defensiva, de su miedo.
Y el miedo sería la razón para que Chávez y sus compinches descalifiquen a la oposición, ataquen al sistema democrático, al imperio, a la empresa privada; insulten públicamente a personas e instituciones, manipulen los poderes del Estado, usando más el poder que el derecho; y traten de imponer el comunismo en nuestro país, por las malas o por las malas. E inducen el terror en la población como estrategia de control político, a pesar de su mentor cuando dijo: el terror es, en su mayor parte, inútiles crueldades cometidas por miedo. Friedrich Engels.
O sea, en la Venezuela de hoy tenemos 2 escenarios: chavistas aterrorizados al pensar en las elecciones del 2012; y oposición y pueblo venezolano unidos, ensayando sin miedo la canción Hasta aquí te trajo el río, de José Miguel Class, que dice: hasta aquí te trajo el río/ y de aquí no vas a pasar.
Y con ñapa: si libertad es ausencia de miedo, en el 2012 seremos libres.
Amén.
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