DARÍO RAMÍREZ| EL UNIVERSAL
lunes 29 de julio de 2013 12:00 AM
Un popular dicho reza: "Quien no conoce su historia, está condenado a repetirla". Y a pesar de que este gobierno, hoy ilegítimo, continuamente reprocha los 40 años de la democracia y recuerda detalladamente episodios de la época, pareciera empeñado en repetir -y de manera estruendosa- los peores males de ese período de nuestra historia contemporánea.
El expresidente llegó al poder hace ya casi 15 años, bajo la premisa de acabar con la corrupción que había hundido al país en la pobreza y la desidia. Promesas que aseguraban ser garantes de un sistema político más limpio y honesto, hoy solo parecen burlas o malos chistes, con más de 30 ministerios llenos de corrupción y falta de interés por solucionar las problemáticas reales que deberían ocuparlos.
El Ilegítimo es conocido como el enchufado mayor y con el mayor de los descaros amenaza acabar con la corrupción que está hasta en los tuétanos de su gobierno. Juran la guerra a la inseguridad y a la pobreza culpando a fantasmas del pasado. Y es que quien los escuche por primera vez, bien puede pensar que acaban de asumir un nuevo gobierno, y que los 15 años solo han sido 3 semanas.
¿Cómo se atreve usted a verle la cara de tonto al venezolano, una y otra vez? ¿De dónde saca tanto descaro para seguir culpando a un pasado lejano de su falta de capacidad y voluntad política? ¿O es que existe una manera lógica de explicar que luego de 15 años en el poder ese grito que les revienta la garganta de ira y odio: No volverán, no ha sido más que la antesala a una copia barata de aquello que tanto criticaron "un gobierno miserable que solo velaba por sus propios intereses"?
La nueva guerra contra la corrupción solo ataca los peces pequeños, no aquellos que se hacen millonarios con la venta de dólares paralelos. Esas parejas de militares o de gerentes de Pdvsa que juegan con el dinero de los venezolanos como si de sus ahorros personales se tratara. No busca una explicación de cómo, por ejemplo, Diosdado o Rafael Ramírez están hoy en las listas de los hombres con más poder y dinero en Latinoamérica.
Ilegítimo, respete al pueblo. Sobre todo a aquel que aún cree en sus mentiras. Y quédese tranquilo que aquí nadie volverá. Venezuela parió una nueva generación que tiene entre ceja y ceja el progreso para todos por igual, que se empeña en transformar la manera de hacer política y acabar con los viejos vicios. Jóvenes que participamos en primarias para nunca separarnos de lo que quiere realmente la gente.
Jóvenes que crecimos viendo cómo ustedes destrozaban nuestro país, cómo sembraban un odio que pareciese irreconciliable entre hermanos. Jóvenes que nos enamoramos de Venezuela con todas nuestras fuerzas y que no descansaremos hasta que no exista quien se atreva a engañarla. Seguimos y seguiremos en una lucha que se transformó en nuestra vida: Progreso y reconciliación.
El expresidente llegó al poder hace ya casi 15 años, bajo la premisa de acabar con la corrupción que había hundido al país en la pobreza y la desidia. Promesas que aseguraban ser garantes de un sistema político más limpio y honesto, hoy solo parecen burlas o malos chistes, con más de 30 ministerios llenos de corrupción y falta de interés por solucionar las problemáticas reales que deberían ocuparlos.
El Ilegítimo es conocido como el enchufado mayor y con el mayor de los descaros amenaza acabar con la corrupción que está hasta en los tuétanos de su gobierno. Juran la guerra a la inseguridad y a la pobreza culpando a fantasmas del pasado. Y es que quien los escuche por primera vez, bien puede pensar que acaban de asumir un nuevo gobierno, y que los 15 años solo han sido 3 semanas.
¿Cómo se atreve usted a verle la cara de tonto al venezolano, una y otra vez? ¿De dónde saca tanto descaro para seguir culpando a un pasado lejano de su falta de capacidad y voluntad política? ¿O es que existe una manera lógica de explicar que luego de 15 años en el poder ese grito que les revienta la garganta de ira y odio: No volverán, no ha sido más que la antesala a una copia barata de aquello que tanto criticaron "un gobierno miserable que solo velaba por sus propios intereses"?
La nueva guerra contra la corrupción solo ataca los peces pequeños, no aquellos que se hacen millonarios con la venta de dólares paralelos. Esas parejas de militares o de gerentes de Pdvsa que juegan con el dinero de los venezolanos como si de sus ahorros personales se tratara. No busca una explicación de cómo, por ejemplo, Diosdado o Rafael Ramírez están hoy en las listas de los hombres con más poder y dinero en Latinoamérica.
Ilegítimo, respete al pueblo. Sobre todo a aquel que aún cree en sus mentiras. Y quédese tranquilo que aquí nadie volverá. Venezuela parió una nueva generación que tiene entre ceja y ceja el progreso para todos por igual, que se empeña en transformar la manera de hacer política y acabar con los viejos vicios. Jóvenes que participamos en primarias para nunca separarnos de lo que quiere realmente la gente.
Jóvenes que crecimos viendo cómo ustedes destrozaban nuestro país, cómo sembraban un odio que pareciese irreconciliable entre hermanos. Jóvenes que nos enamoramos de Venezuela con todas nuestras fuerzas y que no descansaremos hasta que no exista quien se atreva a engañarla. Seguimos y seguiremos en una lucha que se transformó en nuestra vida: Progreso y reconciliación.
No comments:
Post a Comment