En: http://www.lapatilla.com/site/2014/11/29/critican-sistema-de-musica-clasica-en-venezuela/
En el mundo se lo ha elogiado como un modelo que inspira a jóvenes desfavorecidos al vincularlos con la música clásica.
Joshua Goodman, Associated Press
Sin embargo, un nuevo libro retrata El Sistema, la red de orquestas
juveniles de Venezuela, como un “modelo de tiranía” con sesiones de
práctica despiadadas y maratónicas que reflejan aparentemente el estilo
autoritario y el poder ilimitado de su carismático fundador, José
Antonio Abreu.
“El Sistema: Orchestrating Venezuela’s Youth” (El sistema:
Orquestando a los jóvenes en Venezuela) es el primer estudio a fondo que
pone en entredicho a la institución, cuyo lema de acción social
mediante la música ha unido en Venezuela a los conservadores devotos de
la música clásica con su gobierno socialista, que ha financiado en los
últimos 15 años la ampliación de El Sistema.
El musicólogo y docente en artes Geoffrey Baker, que vive en el Reino
Unido, emprendió su investigación después de asistir a una conmovedora
presentación —durante la temporada de conciertos de verano de 2007 en
Londres— a cargo de la Orquesta Juvenil Simón Bolívar bajo la batuta del
alumno más famoso de El Sistema, el niño prodigio Gustavo Dudamel, de
33 años y director de la Filarmónica de Los Ángeles.
Autor de diversos libros sobre música latinoamericana, Baker dijo que
su objetivo era facilitar un estudio riguroso sobre las bases
intelectuales y organizativas de esta maravilla de la música.
Sin embargo, una vez en Venezuela, Baker se dijo abrumado por los
relatos que hicieron integrantes y ex integrantes sobre corrupción al
máximo nivel, favoritismos y relaciones sexuales impropias entre
maestros y alumnos.
“Como toda institución se presentan problemas… pero que El Sistema
tenga un virus es absolutamente falso”, declaró por teléfono el director
ejecutivo de El Sistema, Eduardo Méndez, desde Gotemburgo, Suecia, al
término de la gira de una de las orquestas por Europa.
Los supuestos abusos que se exponen en el libro de Baker incluyen una
amplia gama, desde gritos durante los ensayos hasta relatos de ventajas
a cambio de favores sexuales y una orgía de maestros y estudiantes en
un lugar de retiro.
Baker dijo que no pudo verificar las afirmaciones y rechazó la
solicitud de The Associated Press para tener acceso a sus fuentes
confidenciales, lo que sirve para que los partidarios de El Sistema
refuercen su postura de refutar las aseveraciones publicadas en el
libro.
Baker también dijo que su intención nunca fue investigar el nivel de
generalización de los abusos ni del descontento entre los
aproximadamente 600.000 menores que estudian en los centros de música
ubicados en diversos barrios en el país. Más bien quiso establecer un
contrapeso a una excesiva promoción que cree se ha dado a El Sistema, lo
cual ha distorsionado la percepción del público al tiempo que lo ha
impulsado como marca un modelo de enseñanza en 60 países.
“Todo relato tiene dos partes, pero al momento sólo se ha contado una de El Sistema”, afirmó.
Gran parte de las críticas del autor se centran en Abreu, ex ministro
del gabinete que fundó en 1975 lo que se convertiría en El Sistema.
Abreu ha ganado numerosos elogios internacionales y desde entonces
algunos lo comparan con Juan Pablo II y Nelson Mandela.
Sin embargo, “El Maestro”, como se le conoce en el mundo, es tan
temido como querido, afirma Baker. Abreu ha logrado adaptar El Sistema a
los nuevos tiempos revolucionarios con puño de hierro y maquinaciones
políticas que oscurecen cualquier análisis serio sobre el cumplimiento
de la misión social de ese programa.
El autor también culpa a El Sistema de no estar a tono con la
tendencia hacia una mayor transparencia y técnicas de enseñanza más
innovadoras aplicadas en organizaciones europeas similares.
Afuera de la imponente sede de muros de concreto de El Sistema en
Caracas, decenas de músicos que pertenecen a la Orquesta Sinfónica Simón
Bolívar consideraron intolerables las afirmaciones sobre abusos.
Si bien reconocieron que son fuertes las exigencias en la orquesta,
defendieron vigorosamente la visión de Abreu, al que atribuyen la
construcción de una de las pocas instituciones que han perdurado en
Venezuela.
Ninguno dijo haber sido testigo de algún caso de abuso sexual.
“Es como fútbol americano. Para poder estar en un equipo, tienes que
tener una disciplina fuerte. Y el entrenador no dice ‘por favor,’
‘gracias”’, declaró tajante el contrabajista Abraham Maduro, miembro del
sistema de la sinfónica durante 20 años.
Aunque ha atizado una tormenta de fuego la reprobación pública de
Baker, que el periódico Guardian difundió por primera vez en una
columna, se desconoce si tendrá alguna consecuencia de largo plazo en El
Sistema.
Por ahora, El Sistema no muestra señales de que haya perdido impulso.
El martes, Abreu se presentó al lado del presidente Nicolás Maduro en
la televisión estatal para celebrar la gira europea y revisar el
proyecto “Dudamel Hall”, al que diseño el arquitecto Frank Gehry, de Los
Ángeles, y el cual cuenta con la financiación del gobierno venezolano.
El maestro de artes Marshall Marcus fue testigo cercano del
nacimiento de El Sistema cuando era un músico joven que vivía en
Venezuela a finales de la década de 1970, durante el auge de la
extracción petrolera.
En 2012, Marcus estableció el Sistema Europe, una red de orquestas
juveniles procedentes de 25 países inspirada en el modelo venezolano.
Marcus reconoció que la organización no ha evolucionado al mismo
ritmo de su historial de excelencia musical; sin embargo, censuró que
Baker no presentara estadísticas cuantitativas y utilizara un tono
subjetivo, cargado de emociones, en el que compara El Sistema con el
hampa y la esclavitud.
El Sistema quizá se trate de una autocracia, pero ha permitido el
florecimiento de miles de personas, afirmó Marcus. Si eso es tiranía, no
se le siente de esa manera, agregó. AP
No comments:
Post a Comment