8 February, 2011
Allí nace un mensaje que llegará lejos. Allí hace falta tu respaldo.Un puñito de estudiantes pone su pecho, su salud y su vida en riesgo. Lo hacen por la libertad tuya y mía. Lo hacen con lo único que tienen a su alcance, la capacidad de enviar un mensaje al mundo. No los dejes morir. Que no suceda lo mismo que sucedió con Brito.
Un país, se destapó las sábanas que lo cubrían y se muestra rebelde ante las infamias de este gobierno. Por todas las esquinas se levantan voces de protesta. Desde los trabajadores, hasta los refugiados de las reciente lluvias. Protesta va y protesta viene. Ahora se protesta contra los invasores y la anarquía es tal, que las autoridades observan los acontecimientos, al tiempo que pueblo contra pueblo fija sus límites. Chávez creó un mounstro que no se puede calmar.
Un decadente gobierno pierde cada día su capacidad de mantener bajo control a la sociedad que ha estado engañando. Las mentiras aparecen como hierba en primavera y cada venezolano se muestra impaciente ante la imposibilidad manifiesta de resolver los problemas que nos aquejan. Se acabó el dinero, se acabó la paz de la república. Se acabo la capacidad de engañar al pueblo y ahora, cada minuto que pasa, Chávez se hunde más en su elocuente promesa –imposible de cumplir- de construirle viviendas a un pueblo harto de promesas. Ahora no tendrá un escudo, una excusa o un tente allá.
Hicieron quebrar a la gran mayoría de los constructores que hoy persiguen. Lo lograron por la vía de hacer inviables las construcciones a medio camino. Cemento escaso, acero inexistente y cuando llega hay que pagar por debajo de la mesa. Inflación de treinta por ciento que no se puede agregar al precio pactado de venta, produjeron el resultado a la vista. El gobierno lo sabía y montó este gran show lleno de persecuciones en que convirtió a cada obra atrasada en el producto de un “estafador”. El gobierno tiene cientos de obras atrasadas e inconclusas y no se tilda de estafador. El gobierno acabó con la producción de Guayana y no está asistiendo a un tribunal para que lo enjuicie. El Gobierno quebró al país blindado –al que le sobraba el dinero- y nadie está preso por eso.
El país se convirtió en un cuero seco. Usted lo pisa por un extremo y se levanta por el otro. Casi cualquier medida que toma el gobierno produce un resultado adverso en algún sector de la sociedad. No se puede gobernar un país que vive de protesta en protesta. Las “políticas” de desestimulo y persecución han logrado que una gran cantidad de venezolanos abandonara sus esfuerzos por hacer patria. Algunos –muchos para mi gusto- se han ido y otros recogieron sus ganas para esperar otros momentos, otras circunstancias.
Los estudiantes que duermen su huelga de hambre frente a las oficinas de la OEA, en Caracas, arriesgan su vida cada minuto. No te arropes cada noche plácidamente sin haberles dedicado una visita que los aliente y ponga al gobierno a “recular”. No los dejes morir.
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